domingo, 20 de diciembre de 2015


     Había pasado escasamente hora y media cuando vieron aparecer a Megan con los ojos enrojecidos de llorar sujeta del brazo de un hombre mayor de pelo canoso y porte distinguido que andaba con paso firme y decidido a pesar de su avanzada edad, junto a Kathy que sujetaba amorosa a una mujer aún joven y con gran parecido con Megan que también lloraba afligida, supusieron era su madre
-Cris- expuso desolada Megan abrazándose a él y rompió a llorar de nuevo
-Hola muñeca- la saludó cariñoso besándola tierno en la frente
-¿Dónde está mi nieta y qué ha ocurrido?- preguntó el anciano, su voz sonó temblorosa pero procuró mantenerse entero
-Hola, soy Cris su compañero de ambulancia- se presentó el muchacho y se estrecharon firmes las manos- la tienen aún en el quirófano, señor; sufrimos un accidente de camino a un siniestro y a Ellie le encontraron un coágulo en el lado derecho de la cabeza que se lo están interviniendo en estos momentos- el anciano prestaba atención muy inquieto mientras afirmaba con la cabeza
-¿Y cuánto llevan dentro ya?- preguntó nerviosa Kathy
-Una hora y media más o menos- expuso Nico amable, ella le sonrió dulcemente. Se abrieron las puertas que comunicaban con el quirófano y todos corrieron al lado del doctor
-¿Cómo está mi pequeña doctor?- sollozó angustiada su madre
-Ha salido todo perfecto, no se inquiete; la paciente está bien y pronto la subirán a su planta- expuso satisfecho
-Gracias Virgencita- murmuró más templado Cris
-¿Puede quedarle alguna secuela doctor?- preguntó inquieto el abuelo
-No se preocupe, estaba bien localizado y lo extrajimos limpiamente; fue una suerte que no se quedara totalmente dormida pues lo más probable es que ya no se hubiera despertado- explicó preocupado el médico volviéndose a los quirófanos
-Dios mío- murmuró afligida Megan rompiendo a llorar de nuevo
-¡¡Oh, por Dios bendito; basta ya Megan!! ¡¡Déjate de lloriqueos que estás desquiciándome!!- le regañó duramente su hermana mayor
-¡Déjame en paz ¿por qué no le gritas a mamá que también está llorando?! ¡Yo no soy tan fuerte como tú mari macho!- le increpó dolida rompiendo a llorar aún más y Cris la rodeó cariñoso con su brazo libre por los hombros cobijándola tierno contra su pecho
-Ya basta muchachas, no es el momento ni el lugar; todos estamos muy nerviosos y Elizabeth se pondrá bien que es lo que importa- habló sereno el anciano y con voz ya recuperada, sonaba fuerte y decidida. Las puertas volvieron a abrirse y aparecieron dos enfermeros empujando una camilla donde llevaban a Ellie aún dormida, tenía un aparatoso vendaje en la cabeza y su rostro estaba sereno y menos pálido. Jake sintió unos deseos irrefrenables de correr a su lado y besarla con todo el amor que sentía dentro, pero su madre se le adelantó
-¡Ay mi niña; mi angelito!- sollozó angustiada acariciando con gran dulzura el rostro de su hija; Jake respiró hondamente y, apoyando su espalda contra la pared, solo pudo quedarse observándola pasar por delante de él. Todos siguieron a la camilla menos Jake que se quedó paralizado arrimado a la pared
-¡Jake!- lo llamó Nico sacándolo de su abstracción, él lo miró a lo ojos- ¿Acaso no vienes?- expresó confuso al verlo allí parado, él asintió con la cabeza y lo siguió finalmente.
Todos la observaban inquietos esperando se despertara de una vez mientras su madre acariciaba tiernamente su frente sin dejar de llorar silenciosamente. Jake se arrimó a una esquina apoyando su hombro en la pared con sus brazos cruzados sobre su pecho. La miraba extasiado, así a todo estaba preciosa. Deseaba inmensamente estar a su lado y tomarle de la mano, necesitaba imperiosamente sentir el calor de su mano entre las suyas y besarla con pasión hasta regresarla con él; despertarla de una vez y decirle que la necesitaba a su lado como el aire para respirar; pero su familia rodeando su cama lo tenía paralizado y solo se mantuvo allí arrimado contra la pared observándola con un amor infinito. Si algo le llegara a suceder, él se moriría porque la amaba tanto, tanto… De pronto se enderezó ante aquel pensamiento y su respiración se volvió entrecortada al tiempo que su corazón empezó a latirle frenético; no podía creer lo que le estaba pasando, no sentía atracción por Ellie, no solo estaba enamorado de ella ¡¡La amaba perdidamente!! Esa afirmación lo hundió en un terrible malestar, el pecho empezó a dolerle; no, no podía amarla, eso era completamente imposible, se mentía a si mismo… Pero su interior le contestaba rápidamente que sí, que era cierto, amaba hasta la desesperación a Ellie. No, no podía hacerlo… no debía hacerlo… se dirigió a la puerta presuroso intentando huir de sus propios sentimientos
 -¿A dónde vas?- le murmuró intrigado Nico deteniéndolo en su precipitada huída
-Me voy a casa, aquí no pinto nada; ya está su familia- respondió fríamente desconcertándolo
-Pero está a punto de despertar, Jacob y seguro que ella querrá verte- indicó confundido, su hermano lo miró y lo que Nico descubrió aún lo perturbó más, estaban llenos de ira y dolor en cantidades iguales
-No, está con quien debe estar- aclaró rotundo e intentó seguir su camino
-No seas estúpido y escúchame por una puta vez en tu vida Jacob- expresó rotundo Nico sujetándole fuertemente del brazo para evitar se marchara
 -Métete en tus asuntos Nicolás; ahora suéltame o no respondo- masculló furioso entre dientes clavándole una mirada llena de rabia; su hermano se quedó mirándolo desafiante unos segundos a los ojos
 -¡Mira, que te den; allá tú si no quieres escucharme!- expresó desdeñoso soltándolo al fin y Jake salió de la habitación como alma que lleva el diablo
-Jake- murmuró apenas Ellie
-Tranquila que está aquí preciosa- le contestó animoso Cris- Jake...- lo llamó buscando a su hermano con la mirada encontrándose con Nico que negó con la cabeza, él frunció confuso el ceño pero su hermano Nico solo movió los hombros sin saber qué decir
-Mi niña, mi ángel; despierta mi pequeña, soy yo, mamá- le decía tiernamente su madre besándola dulcemente en la mejilla
-¿Mamá?- repitió ella ya más despejada
-Sí mi niña, estoy aquí contigo; y también está Kathy y Megan y el abuelo…- enumeró dulcemente y Ellie abrió los ojos mirando uno a uno desorientada
-Pero... ¿qué hacéis todos aquí?- expresó totalmente confusa
-Menudo susto nos diste, preciosa- expresó cariñoso Cris tomándole dulcemente la mano
-Cris, íbamos en la ambulancia y... ¿qué ha pasado?- interrogó dando claras muestras de no entender nada
 -¿No te acuerdas chiquita?- indagó Cris y ella negó suavemente con la cabeza; entre todos le expusieron lo ocurrido y ella comenzó a recordarlo todo; de pronto, la imagen de aquel maravilloso beso con Jacob inundó toda su cabeza
-¡¡Jake!!- exclamó de pronto buscándolo ansiosa con la mirada por la habitación
-No está, se acaba de ir- le contestó Nico y todos observaron cómo sus ojos se ensombrecían pesarosos- Ya sabes cómo es princesa- añadió desenfadado pero ella lo miró fijamente a los ojos- no cielo, no discutimos, tranquila; pero la tensión le pudo y huyó como hace siempre al ver que ya estabas a salvo- aclaró compasivo y ambos se sonrieron cariñosos
-Ahora debes descansar ángel mío, acaban de operarte y no debes agotarte- recomendó con dulzura su madre y todos estuvieron de acuerdo; se despidieron de ella dejándola en compañía de su madre
Cuando los dos hermanos regresaron al piso, se encontraron a Jake sentado ante el televisor. Cris se sentó a su lado pero Nico se quedó de pie esperando su reacción al verlo allí; pero él no apartó su mirada de la pantalla
-Jacob, este terco no quiere ir a casa de mamá para recuperarse y hemos pensado que, si no te molesta, puedo quedarme para ayudarte con él hasta que se valga de nuevo...- expuso cohibido Nico, Jake tomó aire profundamente
 -Entonces con eso quieres decir que te vas a mudar aquí de nuevo ¿no? Porque nunca supo valerse solo y no creo que un golpe en las costillas vaya a solucionarlo ahora- bromeó sereno Jake dándole un trago a la botella de cerveza que sostenía en su mano y sus hermanos se rieron más relajados; Nico por fin se sentó en el sofá frente a ellos
-Ellie ya despertó y está bien; pronto se recuperará- le comentó animado Cris
-Me alegro- respondió cortante, sus hermanos se miraron inquietos
-Preguntó por ti como te había dicho que haría- comentó Nico pero él no contestó nada limitándose únicamente a volver a darle un trago a su botella de cerveza
 -¿Puede saberse que te pasa Jacob? ¿Por qué te fuiste así sin decir nada? ¿Sin esperar siquiera a que ella despertara?- preguntó intrigado Cris
-Porque me dio la santa gana- expuso malhumorado de pronto y se levantó del sofá- si te quedas haz algo útil y aguántalo tú; yo me voy a la cama, tanta preguntadera ya me está tocando un poco los cojones- añadió con desdén y se fue a su dormitorio cerrando de un fuerte portazo
-¿Qué rayos le pasa a este ahora?- indagó incómodo Cris
-¿Aún no te diste cuenta peque? Está enamorado de Ellie, eso es lo que le pasa- respondió sereno Nico recostándose contra el respaldo del sofá
-Eso ya lo sé que no soy tonto ¿eh? Y a ella, él ¿o no has visto como se le entristecieron los ojillos cuando supo que Jake se había ido?- expresó resuelto, Nico sonrió dulcemente- pero ¿a qué viene ese mal humor de pronto? Si le estamos diciendo que está bien- insistió confundido; su hermano no contestó nada quedándose solamente mirándolo fijamente a los ojos- ¿Qué? ¿Acaso tú sabes algo que yo no sé?- instó para que hablara, Nico tomó aire profundamente recostándose de nuevo contra el respaldo del sofá y entrecruzó sus manos en su nuca
-Está convencido de que tú también estás enamorado de Ellie y eso es lo que lo tiene así- expuso desenfadado moviendo desentendido los hombros, Cris lo miró boquiabierto
-Pero ¡¿De dónde carajo sacó semejante cosa?!- exclamó atónito mirando asombrado a su hermano mayor
-Yo qué sé, peque; la verdad es que yo también lo pensaba al principio; hablabas tanto de ella y con tanto cariño que, cuando fue el asalto al banco y empecé a ver que a Jacob le hacía chiribitas los ojos por Ellie, me estaba temiendo una tormenta entre vosotros dos- aclaró sincero mirando preocupado a su hermano pequeño
-¡Qué estupidez! ¡Claro que quiero mucho a Ellie! ¡¿Cómo no quererla si es un ángel?! ¡Pero como una gran amiga, casi una hermana, pero nada más!- expresó rotundo, Nico movió desenfadado los hombros- mira, voy hablar con él y a aclarar todo esto cuanto antes- expuso levantándose resuelto del sofá
-Yo que tú lo dejaba para mañana, peque; lo conoces tan bien como yo y ahora está encabritado, no querrá oírte y lo único que conseguirás es que te mande al diablo- lo detuvo su hermano, Cris lo miró dudoso y él le sonrió malicioso- además, déjalo sufrir un poquito… le vendrá bien por cabezón- le propuso socarrón
-¡Nico! ¡No!- repuso el muchacho contrariado
-Un poquito solo peque… hasta mañana por la mañana, por favor- suplicó pícaro sonriendo con malicia- anda, hazlo por mí peque
-Sois los dos igual de retorcidos ¿lo sabías?- expuso conmovido pero se sentó de nuevo a su lado y su hermano soltó una sonora carcajada vengativa
Tras pasar una noche sin poder cerrar ojo, Jake se levantó temprano y pasó por el hospital antes de irse al trabajo. Sentía una necesidad imperiosa de ver a Ellie. Al llegar ante la puerta de su habitación, la observó a través de la ventanita de la puerta. Dormía plácidamente y estaba preciosa, cada día más bonita, pensaba dolido. Su madre también dormía a su lado acurrucada en el sofá cubierta con una manta; a punto estaba de entrar cuando su madre se movió cambiando de posición y Jake se fue presuroso de allí. Regresó entrada la noche, tampoco estaba sola; ahora era Kathy la que estaba con ella. Tampoco se atrevió a entrar y solo se conformó con mirarla unos segundos a través de la ventanita.
Así los tres siguientes días, cuando no estaba su madre era Kathy la que la acompañaba, nunca estaba Megan que era la que él conocía y eso lo cohibía tremendamente marchándose seguidamente sin llegar a entrar. Todas las tardes la visitaban Cris y Nico, ella los recibía con una inmensa sonrisa y un brillo especial en la mirada así los veía llegar pero se apagaba al instante de comprobar que Jake no venía con ellos. Intentaba seguir las conversaciones mostrándose alegre y amena pero sus lindos ojos color miel no podían evitar mostrarse tristes y apagados.
Aquella última noche en el hospital y tras marcharse Cris y Nico, Ellie se quedó muy callada mirando abstraída la colcha que cubría sus piernas.
-¿No quieres dormir?- le preguntó Kathy sentada junto a ella en el sofá tras llevar un buen rato observándola en silencio
-No tengo sueño- murmuró apagadamente
-¿Qué te pasa mi chiquita?- indagó preocupada su hermana tomándole cariñosa su mano entre las de ella, Ellie la miró y sonrió dulcemente intentando disimular su tristeza
-Nada ¿por qué?
-A mí no me engañas Ellie… Bueno, en realidad no estás engañando a nadie, pero a mí mucho menos que a ninguno- aclaró resuelta, Ellie frunció intrigada su ceño- mi chiquita, todos nos damos perfecta cuenta de que estás muy triste y apagada aunque intentes disimularlo ¿qué te pasa mi ángel?- volvió a preguntar acariciándole dulcemente su mano entre las de ella, Ellie apretó sus labios bajando su mirada de nuevo a la colcha sin contestar- ¿Acaso tiene razón Nico cielito?- Ellie levantó la cabeza y miró extrañada a su hermana
-¿Nico?- repitió desconcertada- ¿De qué has hablado con Nico y qué es lo que dice?- interrogó intrigada
-Pues hemos estado hablando sobre ti y de ese bajón moral que intentas disimular y él dice que todo es por culpa de… ¿cómo es que le llama siempre?- expresó y se quedó pensando unos segundos- ¡Ah sí! “ese cenutrio de mi hermano Jacob”- expresó agravando su voz intentando imitar guasona a Nico y ambas rieron divertidas, pero al segundo siguiente, Kathy volvió a ponerse seria- ¿Es eso mi niña? ¿Tanto te afecta que no venga a visitarte ese tal Jacob?- instó interesada
-Y tú mucho hablas últimamente con Nico ¿no?- evitó responder, Kathy se sonrojó tremendamente sin poder evitarlo y Ellie abrió atónita sus lindos ojos color miel- ¡¡Te gusta Nico!!- exclamó al comprender a que se debía el tremendo sonrojo de su hermana mayor
 -No, que va- respondió demasiado rauda y esquiva evitando mirarla a los ojos, Ellie soltó una amena carcajada
-¡No me engañas Kat; como tú me conoces a mí, yo te conozco a ti y sé que te gusta Nico o no te sonrojarías de esa manera!- aclaró rotunda, su hermana la miró atrapada a los ojos y al final sonrió derrotada
-Está bien, sí, me gusta un poco Nico ¿vale?- expresó sonrojándose de nuevo y ambas rieron alegres- es tan caballeroso y educado Ellie... además, tiene una conversación amena y es muy inteligente ¿sabías que también le encantan los caballos? ¡¡Y sabe un montón sobre ellos!!- expresó emocionada y llena de ilusión, Ellie sonrió enternecida
-¿Un poco dices? Yo más bien diría que un mucho, hermanita- replicó socarrona, Kathy volvió a sonrojarse al tiempo que soltaba una sonrisita traviesa
-La verdad es que ya me gustó mucho la primera vez que lo vi; cuando Cris nos lo presentó, me impactaron sus ojos grises tan bonitos en contraste con su morena piel y su pelo tan negro... y es tan atractivo Ellie...- declaró encandilada, Ellie volvió a reír entretenida- pero tras aquel fin de semana que vinimos a pasar contigo, creí que no volvería a verlo y lo aparté de mi mente; hasta que un día llamó a casa...
-¡¿Llamó a casa?!- repitió atónita Ellie abriendo asombrada sus ojos, Kathy asintió con la cabeza
-No sé cómo consiguió el número, supongo que se lo pidió a Cris, pero la cuestión es que me propuso acompañar a Megan aquella tarde a la ciudad y vernos; yo accedí y la verdad es que conectamos muy bien, es muy divertido y tenemos gustos muy parecidos: le gustan los caballos, leer... es hincha de los Cobra...- añadió satisfecha
-Por supuesto, ese es un requerimiento indispensable en todo hombre que quiera entrar en nuestra familia- aclaró rotunda Ellie y ambas rieron divertidas
 -La verdad es que fue una velada maravillosa y me lo pasé realmente bien Ellie, así que llevamos viéndonos desde hace dos semanas y Ellie... creo que estoy enamorada de Nico- se sinceró mirando cohibida a su hermana
-Pero Kat... ¡¡eso es fantástico, cielo!!- declaró feliz Ellie oprimiéndole cariñosa sus manos entre las de ella pero Kathy la miró reticente
-¿Tú crees Ellie?- expresó temerosa
-Claro que sí corazón, ya es hora de que tú también vivas y seas feliz hermanita; no todo es luchar por sacar adelante el rancho y Nico es un buen hombre, como también lo es Cris- aclaró complacida y su hermana sonrió dichosa
-¿Y Jacob, Ellie? ¿Acaso Jacob no es un buen hombre?- interrogó desconfiada, el rostro de Ellie se tornó serio y apartó la mirada hacía las manos entrelazadas de ambas posadas sobre la cama quedándose en silencio- ¿Qué pasa Ellie? ¿Qué te ocurre con ese tal Jacob?- insistió y Ellie tomó aire profundamente
-Que estoy total y plenamente enamorada de él, Kathy… pero él me rehuye- habló al fin muy triste y apagada
-¡¿Por qué?! ¡¿Acaso es idiota o ciego?! ¡¡A que va a ser verdad que es un cenutrio amargado!!
 -¡¡No Kathy!! ¡¡No es así; Jake es un hombre maravilloso pero sufrió mucho y le cuesta abrirse de nuevo!!- lo defendió amorosa, su hermana sonrió divertida al verla defenderlo tan decidida; pero su sonrisa se borró al instante de ver llenársele los ojos de lágrimas
-Ellie ¿qué pasa corazón?- interrogó inquieta
 -¿Por qué no viene Kathy? ¿Por qué no quiere verme?- sollozó dolida sin poder retener las lágrimas que empezaron a correr por sus mejillas; su hermana se levantó de la silla y, tomándola tierna entre sus brazos, la cobijó amorosa contra su pecho
 -¡Ainss, por Dios bendito mi niña, no llores!- expresó conmovida acunándola dulcemente entre sus brazos
-Es que le quiero Kat, le quiero ya tanto que hasta duele...- expresó dolida por el rechazo de Jake
-¡¡Aghhh, maldito sea! Aún no lo conozco pero ya me está cayendo gordo ese tal Jake- expuso Kathy resentida, Ellie rió divertida entre lágrimas- Anda, intenta dormir y descansa corazón; mañana te darán el alta y allá, con la distancia y la tranquilidad del rancho, tendrás tiempo de ordenar tus ideas y ver si este amor merece la pena o solo te hace sufrir... y, cariño mío, si es así, déjalo y olvida a Jake mi niña; ya has sufrido bastante para seguir haciéndolo por quien no te merece ángel mío- expresó tierna besándola dulcemente en la cabeza mientras la acunaba suavemente entre sus brazos.
Jake llegó al hospital y su corazón se paralizó de pronto al encontrarse la habitación de Ellie vacía, en apenas unas décimas de segundo, cientos de macabras ideas le atravesaron la cabeza al no verla allí; impaciente y ansioso por respuestas buscó con la mirada a una enfermera a lo largo del pasillo
-¡Enfermera, por favor!!- llamó nervioso a una muchacha que salía del cuarto de a lado
-Dígame, en qué puedo ayudarle- preguntó servicial ella acercándose mostrando una amable sonrisa
-Por favor, la paciente de este cuarto...- expresó temeroso de su respuesta
-¿La señorita Elizabeth Cameron?- se aseguró la muchacha, Jake asintió con la cabeza- ya se ha ido, le han dado el alta esta mañana
-Gracias a Dios, por un momento pensé que...- murmuró resoplando aliviado y la enfermera sonrió compasiva comprendiendo su momentáneo susto.
Jake regresó al piso y al abrir la puerta se quedó frío al ver a Cris enderezándose sobresaltado del sofá por aquella inesperada llegada de su hermano al tiempo que una voz femenina pegaba un leve grito ocultándose aún más tras el respaldo del sofá
-¡¡La leche Jake, que susto nos has dado!!- exclamó sorprendido Cris recomponiéndose presuroso la ropa
-Maldita sea, lo que me faltaba joder- exclamó lleno de fastidio al reconocer aquel pelo castaño casi rubio de la muchacha antes de que se ocultara totalmente: era Ellie, su Ellie dándose el lote con su hermano Cris en el sofá... sintió un terrible pinchazo en el corazón que le hizo doler tremendamente el pecho; volvió a cerrar la puerta para no seguir viendo aquella imagen que era tan terrible y dolorosa para él
-¡¡Ey Jake, espera!!- gritó su hermano pequeño para detenerlo pero él huyó de allí rápidamente
-¡¡Jopelines que susto, pensé que era Kat que ya regresaba!!- expuso sobrecogida Meg sentándose también en el sofá al tiempo que se abrochaba los botones de su camisa
-Pero no lo era- indicó pícaro y ambos se miraron maliciosos a los ojos; Cris volvió a atrapar aquellos suculentos labios mientras la recostaba de nuevo sobre el sofá al tiempo que reían divertidos.
Jake bajó las escaleras de tres en tres huyendo de la imagen de Ellie besándose con su hermano Cris grabada en su retina. Al alcanzar el portal se encontró con una muchacha que llamaba al telefonillo
 -¡¡Clarise ¿qué haces tú aquí? ¿Acaso pasó algo?!!- exclamó alarmado abriendo el portal
-Lo siento pero creo que se ha confundido- respondió la muchacha volviéndose y Jake abrió atónito sus grandes ojos negros al descubrir que era Kathy, la hermana de Ellie
-Oh, discúlpame; pero por un momento me pareciste mi prima Clarise- se disculpó sonrojándose tremendamente, Kat le sonrió comprensiva
-No pasa nada- repuso amistosa, Jake le sonrió amable y, cohibido y abochornado, se alejó de ella en dirección a un coche negro aparcado un poco más abajo del portal. Kathy se quedó observándolo; era un muchacho muy atractivo, muchísimo...
-¿Qué te dijo ese alocado de mi hermano Jacob?- preguntó interesado Nico al llegar junto ella, Kathy lo miró confundida
-¡¿Ese es Jake?!- repuso pasmada volviendo de nuevo sus ojos al coche negro que ya se perdiera entre el tráfico y recordó la expresión de su hermana Megan el día que conocieran a Nico reconociendo que tenía muchísima razón: ¡¡menudos tres hermanitos!! ¡¡No le extrañaba que Ellie estuviera enamorada de él!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario