La mirada oculta de Eva

      Llegaron muy tarde, casi rondaba las ocho de la noche; Megan estaba eufórica y hablaba dicharachera mientras que Ellie parecía extenuada del trajín de las compras.
-Creí que ya no regresabais- bromeó Cris al verlas entrar, ya estaba preparado para salir con un pantalón de pinzas negro y una camisa suelta por fuera verde agua
-Casi- respondió agotada Ellie- no nos quedamos encerradas en el centro comercial por milagro- añadió chistosa y él rió animado
-¡Estás impresionante, esa camisa te queda de perlas con el gris de tus ojos!- lo felicitó animosa Megan y él le sonrió agradecido- ¡Había tantas tiendas y tantas cosas que ver que no me dio tiempo a nada!- siguió hablando entusiasmada
 -¿Y Jake?- indagó curiosa Ellie al no verlo en la sala
-En el baño acabando de prepararse
-¡Vamos nosotras también o llegaremos tarde a la cena!- expuso eufórica Megan
-Solo hay un baño Meg, hay que esperar- le expuso serena su hermana dejándose caer rendida en el sofá; Megan los miró atónita
-¡¿Uno solo?! ¡¿Y os arregláis?!- preguntó incrédula
-Son chicos Meg, no tardan dos horas en prepararse como tú- aclaró despreocupada, Jake salió del baño; llevaba puesto un pantalón vaquero negro con un jersey de fino hilo en crudo que resaltaba su musculoso cuerpo
 -¡Caray chico, estás para comerte también!- expuso deslumbrada Megan provocando la risa animada de los dos hermanos al tiempo que Ellie se volvía a sonrojar por la indiscreción de su hermana- ¡Vamos Elizabeth o no nos esperarán y estos dos bombones no los podemos dejar salir solos!
-Por Dios Megan, cálmate un poco que pareces una vieja desesperada- le regañó abochornada por tanto descaro pero su hermana rió divertida arrastrándola de la mano hacia su dormitorio.
 -Siempre tan apocadita y vergonzosa, a los hombres también les gusta que los adulen como a nosotras Ellie; no todos son ese desgraciado de…
-¡Megan!- le regañó duramente callándola al instante
 -¡Oh, que preciosidad de habitación, Ellie! Eso sí, un poco sosita como tú y le faltan muchísimas cosas, pero está bien… ¡¡Oh, por Dios bendito!! ¡¿Cómo te puedes arreglar con un armario tan pequeño Ellie?!- exclamó ya de nuevo dicharachera y animosa cuando cerraron la puerta, los hermanos sonreían divertidos escuchándola hablar
-¿Pero esta tía cuándo respira? salta de un tema a otro sin pararse a tomar resuello, te juro que yo estoy todo el tiempo expectante de verla desfallecer ahogada de un momento a otro- comentó socarrón Jake y ambos hermanos rieron amenos.
Al cabo de un buen rato, ya cansados y aburridos de la larga espera sentados en la sala, aparecieron radiantes y hermosas dejándolos deslumbrados. Megan ya se apreciara de sobra que era bonita y elegante sin dejar de ser juvenil, pero acostumbrados a ver siempre a Ellie de vaqueros y camisetas con deportivas, descubrirla con aquel vestido rojo ceñido que marcaba su cuerpo sinuoso y perfecto, con aquel escote en V que revelaba unos pechos exuberantes, unos zapatos de aguja que resaltaban sus piernas bien formadas y su rostro maquillado tenuemente resaltando aquellos bellos ojos castaños y aquella atrayente y jugosa boca; los dejó maravillados
 -¿Todo eso lo tenías ya antes o también lo agenciaste en el centro comercial?- bromeó Jake mirándola extasiado, ella se sonrojó de nuevo mientras los demás reían divertidos
-¿A qué está preciosa? No tanto como yo claro está, pero está también muy bien; nunca sabe valorar y explotar lo que Dios le ha dado, se esconde detrás de esas ropas flojas y nada atractivas que tan mal le sientan desde que aquel imbécil…
-¡¡Megan!!- la atajó irritada Ellie mirándola furiosa, su hermana apretó incómoda los labios
-¿Nos vamos entonces? Tengo hambre- repuso de inmediato recobrando su alegría, ambos hermanos sonrieron entretenidos siguiéndolas fuera del piso- Pues lo que decía, nunca he visto una mujer menos coqueta que ella; hasta Kat es más presumida que Ellie, aunque trabaja en el campo como un jornalero más, sabe estar a la altura cuando se precisa- siguió charlando entusiasmada mientras entraban en el ascensor
-Vale ya Megan, déjame en paz ¿quieres? me vas a dar la noche… lo estoy viendo- protestó abochornada Ellie entrando en la parte trasera del coche de Jake
-¿Quién es Kat? Ya es la segunda vez que la nombras- indagó curioso Cris sentado en el asiento del copiloto junto a su hermano Jake que ya conducía su coche por el intenso tráfico de la ciudad
-¿Ellie no os ha hablado de ella? ¡Natural, nunca cuenta nada! ¡Que mujer más sosa Dios mío!Tampoco nos da muchas explicaciones a nosotras de vosotros no os vayáis a creer- comentó despreocupada mientras Ellie ponía los ojos en blanco y dejaba caer hacia atrás su cabeza sobre el asiento trasero agotada de la incontrolable verborrea de su hermana; Jake, sentado ante el volante, la observó por el espejo retrovisor y rió divertido ante su gesto de desaliento y derrota- Kat es nuestra hermana mayor, aunque apenas nos lleva once meses, y no se parece a nosotras; aunque la verdad, ninguna nos parecemos en realidad, somos las tres muy distintas: Ellie se parece a mamá, cohibida, vergonzosa, callada... yo a la abuela Katherine según dice: charlatana, alegre, desenfadada... y Kat...-se calló unos segundos- bueno, Kat no sé muy bien a quien se parece la verdad, su vida es estar trabajando de sol a sol con los jornaleros y su única ilusión son los caballos, trabaja como un hombre más en el rancho y es más montuna que las cabras- resolvió desenfadada
-¡¡Megan por Dios, sé más respetuosa!! Es tu hermana caray, y si ella no se desviviera por el rancho, nosotras no podríamos tener la vida que disfrutamos... sobre todo tú- le recriminó fastidiada cuando ya llegaban al restaurante, parecía elegante y lujoso; Ellie lo observó inquieta- ¿Esto no es algo caro?- aclaró mirándolos intranquila
-¡¡Elizabeth por Dios; no seas tan usurera!! ¡Desde que eres una asalariada estás echa una agarrada!- le reprochó su hermana despreocupadamente provocando las risas de los dos hermanos
-Y tú una alocada sin sentido ni responsabilidad alguna, no todo el mundo tiramos sin pensar con el dinero como haces tú ¿sabes?- le bramó enfadada, Jake la sujetó amable por el brazo intentado serenarla
 -Pago yo, no te preocupes; te debo una disculpa y esta es la mejor manera que se me ocurre- le murmuró ameno y ella sonrió amistosa
-No es eso Jake, de verdad, no necesito que me invites, pero es que...- miró molesta a su hermana que le que le hizo un gesto de desaire con los hombros entrando resueltamente decidida dentro del local acompañada de Cris- ¡Por Dios, es que entre su cháchara y su forma de ser me saca de mis casillas!- resolvió desarmada y Jake sonrió comprensivo
Estaban entretenidos con la continuada conversación de Megan mientras cenaban; pero Jake no dejó de observar que ellas parecían estar acostumbradas a ese mundo de elegancia y a ser servidas; se mantenían despreocupadas a su entorno, colocaron elegantemente su servilleta sobre su regazo distraídamente y se ladeaban inconscientemente hacia la derecha para que el camarero les sirviera por la izquierda como es debido sin perder ni dejar de charlar animosas. Luego se fueron a bailar. Megan entusiasmada arrastró de inmediato a su hermana a la pista acompañadas de Cris, Jake se dirigió a la barra donde pidió un tequila que bebió observándolos distraído moverse en la pista. Aunque no quería, su mirada siempre acababa en el rostro de Ellie, aquella mujer cada vez lo tenía más encandilado pese a que se esforzaba por evitarlo. Apareció un grupo de amigos y entabló una amena conversación con ellos, pero sus ojos se le escapaban irremediablemente hacia Ellie. Observó como los tres salían de la pista y, mientras ellas se acomodaban en los sofás alrededor de una mesita, Cris se acercó a ellos y tras saludar alegre a los amigos de Jake, pidió unas consumiciones y regresó junto a las muchachas. Aunque le insistieron hasta la extenuidad que los acompañaran cuando ya se iban, Jake prefirió quedarse; se pidió otro tequila y se unió a ellos sentándose junto a Cris frente a ellas. Oía despreocupado la conversación animosa entre ellos. La música cambió volviéndose melódica y romántica
-¡Vamos Cris, sácame a bailar anda, que me encanta esta canción!- se auto invitó Megan tomándolo de la mano y arrastrándolo ya a la pista de nuevo ante la mirada desconcertada de su hermana
-¿No se cansa nunca?- expuso divertido Jake
-Energías acumuladas, como no pega golpe- contestó ella queriendo ser reprochadora pero le salió muy cariñoso y se rieron entrañables- ¿Y tus amigos?
-Ya se fueron, tenemos por costumbre detenernos poco en un mismo sitio- aclaró amistoso y se volvieron a sonreír
-¿Por qué no fuiste con ellos?- indagó despreocupada
-Porque hoy salí con vosotros, no con ellos... ¿o qué? ¿acaso te molesto?- contestó socarrón y ella lo miró sorprendida
-¡No, claro que no! ¡¿Por qué dices eso?!- clamó inquieta mirándolo preocupada por su comentario, él sonrió animado
 -Tranquila, relájate; solo bromeaba- aclaró chistoso- ¿Qué te pasa Ellie? Desde que llegó tu hermana estás tensa, inquieta ¿te preocupa algo?
 -No que va- respondió rápidamente demostrando que no era cierto y sí le inquietaba algo- solo que tiene la lengua muy suelta y habla sin recapacitar, eso me pone nerviosa
-¿Temes que te descubra algún oscuro secreto que no quieres que descubramos?- bromeó despreocupado pero ella lo miró intensamente desconcertándolo
-No me preocupa que os cuente nada porque nada tengo que esconder- dijo serenamente- es por mí, a veces habla de cosas que no debe; es una bocazas que no piensa y comenta cosas del pasado que no tiene por qué comentar sin darse cuenta de que me molestan, que me hacen daño y me alteran… pero no se da ni cuenta
-¿Y ese pasado por qué te altera tanto?- indagó curioso
-No quiero hablar de eso Jake, disculpa; el pasado está muy bien allí: en el pasado, y mejor no tocarlo- aclaró pesarosa pero le sonrió dulcemente- ya está bien de preguntitas ¿no? ¿Te apetece bailar?
-¡¿Bailar?!- expuso sorprendido, ella sonrió amena- Hace tanto que no lo hago que creo que ya ni me acuerdo como se hace- rieron divertidos
-Entonces, ahora deberías contarme tú algo ¿no crees?
-¿Cómo qué?- preguntó animado
 -Como por ejemplo a que se debe que estés tan enfadado con tu hermano Nico- él se puso serio de repente y ella se inquietó- perdona pero, por más que lo pienso, no llego a entender que puede haber tan serio que me aparte de una de mis hermanas de esa manera- aclaró decidida él se puso de pie de repente y Ellie se imaginó que le iba a dar uno de esos desplantes del principio y que ya hacía tiempo no le daba pero, para su sorpresa, le tomó de la mano tiernamente mientras le sonreía ameno
-Será mejor bailar entonces si tu curiosidad va a ir por eses derroteros- comentó entrañable y la guío hasta la pista.
Aunque bailaban a una distancia educada y prudencial, estaban acalorados; a Ellie sus manos en su espalda le quemaban a través del fino vestido, deseaba que la abrazara más y la estrechara contra aquel cuerpo maravilloso como había hecho la noche anterior, su dulce aroma la envolvía excitándola tremendamente. A él le pasaba de igual manera, su perfume a flores de su pelo le inundaban provocándolo, deseaba atraparla entre sus brazos y besarla ardientemente en aquella boca que lo atraía hasta la desesperación. Sus ojos se encontraron y descubrieron aquel brillo excitante y deseoso en ambos. Jake reaccionó presuroso escapando de ello, se la pasó rápidamente a Cris recogiendo a Megan entre sus brazos desconcertándolos a todos
-Cambio de pareja- indicó alegremente mientras proseguía el baile ya con Megan entre sus brazos, todos rieron divertidos aunque Ellie sintió una gran desazón por aquel inesperado cambio de parejas. El ritmo del baile volvió a tornarse frenético y ruidoso; Jake se alejó dejándolos bailar a los tres dirigiéndose a la barra donde pidió un tequila que bebió de un solo trago indicándole rápidamente al camarero que le sirviera otro que también digirió de un solo trago; chasqueó los dedos pidiendo otro. Cris se puso a su lado apoyándose de espaldas al mostrador
-¿Ya te has rendido?- le preguntó animoso a su hermano
-No tienen descanso, no les puedo seguir el ritmo- comentó divertido sin dejar de observar la pista y se sonrieron amenos; Jake saboreó su tequila- ¿No crees que es preciosa Jake?- le preguntó de pronto deslumbrado, él lo miró abatido
-¿Te gusta mucho, verdad?- indagó intentando parecer sereno
-Me tiene encandilado desde el momento en que la vi y mira cómo se mueve, parece una sirena- aclaró sin poder apartar sus ojos de la pista
-¿Y por qué no te lanzas de una puta vez?- le increpó fastidiado Jake bebiéndose  de golpe su tequila; esta vez el camarero atento ya no esperó su llamada y le rellenó rápidamente el vaso- no comprendo a que estás esperando ¿a que alguien se te adelante y se la tire delante de tus narices o qué?
-No seas burro, animal; aún no la conozco tanto como para eso- le regañó molesto
-¿A no? ¿Qué más necesitas? ¿Qué su familia te dé su visto bueno?- se burló despreciativo- no seas tan incauto y parsimonioso joder, si te gusta tanto lánzate ya- replicó irritado bebiéndose de nuevo el vaso de tequila de golpe que el camarero ya rellenó al momento
-¿Te refieres a ser tan rápido como tú bebiendo?- le amonestó cariñoso y Jake lo miró confundido- estás demasiado acelerado hermanito y estás bebiendo sin control ¿te ocurre algo?
-No me seas toca pelotas, escuincle del demonio- le recriminó fastidiado aunque detuvo su premura bebiendo y saboreó algo más su copa.
A pesar de las protestas de Megan, Ellie decidió que ya era hora de regresar
-Nosotros estamos cansados de trabajar toda la semana Megan, sé un poco responsable- le regañaba ante sus pucheros en el ascensor
-Pero me lo estaba pasando bien Ellie- protestaba infantilmente
-Lo repetimos el sábado que viene ¿qué te parece?- la intentó consolar tierno Cris
-¡Vale, está decidido; regreso el sábado!
 -¡Tú dale alas que como ya tiene pocas!- le regañó Ellie a Cris que reía animado. Solo Jake parecía en otro mundo y no había abierto la boca desde el pub, al llegar al piso, se fue directamente a su cuarto encerrándose sin decir nada- ¿Le ocurre algo?- indagó curiosa Ellie a Cris mientras Megan reía y bailaba metiéndose en el dormitorio de Ellie después de darle las buenas noches con un beso en la mejilla a Cris
-Por la forma de beber en el pub creo que sí, pero no logro comprender el por qué pues estaba muy tranquilo durante la cena- comentó calmadamente y se fue a su cuarto.
 Ellie se desmaquilló y se lavó la cara en el baño sintiéndose mal pensando en Jake. Se sentía culpable de que el motivo de su cambio de humor hubiera sido ella con su falta de tacto al preguntarle por Nico. Tomó aire profundamente en un intento de calmar su inquietud y abrió la puerta del baño encontrándose de frente con Jake inesperadamente para ambos que se sobresaltaron al tiempo.
 -Uy, no sabía que estabas ahí; me has asustado- exclamó sobrecogida
-Carajo, no sabía que estaba ocupado- indicó él al unísono también amedrentado y se sonrieron amenos. Se miraron fijamente a los ojos durante largo rato ¡¡Como deseaban ambos rodearse con sus brazos y besarse hasta fundirse en uno solo!! Pero ninguno hizo nada.
 -Buenas noches, que descanses- se decidió a hablar ella pasando junto a él
 -Espera Ellie…- expuso precipitado sujetándola suavemente del brazo deteniéndola y ella lo miró curiosa
-Dime- ambos percibieron de nuevo aquella chispa de deseo en los ojos del otro que les aceleró el corazón como ocurriera en la pista de baile; él dejó resbalar despacio su mano por su brazo en una tierna caricia donde sentía la suavidad y calidez de la piel de Ellie al tiempo que provocaba en ella un escalofrío placentero que le recorría la espalda y le erizaba la piel
 -Nada, buenas noches- repuso de pronto rudamente desapareciendo dentro del baño dejándola de nuevo confundida y desubicada como ocurriera en el pub con su cambio brusco de pareja.
-¡Oh, Ellie que bien me lo pasé!- decía entusiasmada Megan tirada boca arriba sobre la cama mientras Ellie se ponía su camisón- ¡¡Hermanita, creo que me acabo de enamorar hasta la médula!!- declaró apasionada
-Que novedad- murmuró desinteresada aunque el corazón le latía frenético, se temía que estuviera hablando de Jake
 -¡¡Esta vez hablo en serio Ellie!!- protestó fastidiada por su burlona expresión y Ellie le sonrió dulcemente a modo de disculpa- ¡¡Que guapo es, que cuerpo tiene, que ojazos…!! ¡¡Y como baila hermanita!- seguía exponiendo arrebatada se volteó sobre la cama y apoyó su mentón en sus manos acodadas sobre el colchón mirando a su hermana intrigada- ¿Sabes si tiene novia?
-¿Quién? ¿Jake?- preguntó no sin antes tragar nerviosa saliva para serenarse un poco y no parecer ansiosa
-También está muy bien pero no, yo me refiero a Cris- aclaró y Ellie respiró más tranquila.
-No lo sé, pero creo que no; siempre estamos juntos o está en casa… no, no creo que haya nadie
-¡¡Qué bien!!- expuso feliz tirándose de nuevo de espaldas sobre la cama pero rápidamente se volvió a enderezar mirando a su hermana preocupada- ¿No te interesará a ti por un casual, verdad?
-¿Cris a mí? No, tranquila; a mí no me interesa nadie y menos Cris- aclaró rotunda metiéndose en la cama
 -¡¡Genial!!- repuso sonriendo feliz acostándose también junto a su hermana- de nuevo compartiendo cama como de pequeñas; solo falta Kat- expresó gustosa rodeándole cariñosa la cintura con sus brazos, Ellie rió divertida y la besó amorosa en la frente tomándola maternal entre sus brazos
 Aquella noche no lograba dormirse, daba vueltas desesperadamente en la cama sin poder calmarse. Ellie lo tenía trastornado y saber que su hermano estaba enamorado de ella lo agobiaba tremendamente. Se sentó al borde de la cama y se quedó mirando su reflejo en el espejo de la puerta del armario
-¡¿Qué cojones nos pasa a todos en esta familia?! ¡¿Acaso no hay mujeres suficientes en el mundo sin tener que interesarnos por la de nuestro hermano precisamente?!- le reprochó furioso a su reflejo- No eres tan distinto a Nico en el fondo cabrón- se dijo afligido- no eres para nada mejor que él, hijo de la gran chingada- clamó enfurecido y se vistió presuroso saliendo del piso encolerizado consigo mismo. Caminó sin rumbo por las calles vacías a esas horas de la mañana, caminaba despacio con las manos metidas en sus bolsillos traseros; sentía la necesidad angustiosa de arrancarse de la cabeza a Ellie pero, cuanto más intentaba desterrar su imagen, más regresaba su dulce rostro a invadir sus pensamientos, aquellos ojos que lo volvían loco y aquellos jugosos labios lo embargaban, la desesperación por atraparlos regresaba agobiándolo de nuevo. Sin darse cuenta había amanecido y las calles comenzaron a llenarse de gente. No podía regresar al piso, no podía estar cerca de ella, debía intentar alejarse lo máximo posible hasta que esa tontería se le pasara. Llamó desde una cabina a casa
-¿Cris?- repuso al oír descolgar el teléfono
-¿Jake? ¿Ya te has ido?- se sorprendió al escucharlo- creí que aún dormías como ocurre con las muchachas ¿estás bien? ¿Pasó algo?
-No, no pasó nada, todo está bien, solo que no podía dormir, no te preocupes; llamo para avisar que no me esperes a comer y que regresaré tarde esta noche
 -De acuerdo ¿pero estás bien de verdad?
-Sí estoy bien ¿vais a quedaros en casa o saldréis por ahí?- indagó interesado y al instante se golpeó la cabeza con el puño; era estúpido, quería alejarse de ella y no perdía oportunidad de saber dónde estaría o que haría
-No sé, pero probablemente Megan no quiera quedarse en casa encerrada, es tan distinta a Ellie- aclaró desenvuelto- les propondré ir al cine
-Eso está bien, que os divirtáis- colgó el teléfono, tenía que olvidarla… Y sabía cómo conseguirlo al menos por unas horas, descolgó y volvió a marcar -¿Kelly? Soy Jake ¿estás sola en el piso?
 -No, Fredy y Bárbara han regresado ya ¿por qué?- le contestó despreocupada la interlocutora
-¡Vaya!- repuso pesaroso- entonces... ¿te apetece salir y pasar el día conmigo?- propuso animado y su rostro se iluminó ante la aceptación de la muchacha.
 -Ven con nosotros Ellie, anda- suplicaba una vez más Megan a su hermana recostada cómodamente en el sofá mirando el televisor- Al cine, un helado y me regreso al rancho
-No me apetece Meg, de verdad; además juegan los Cobras la final y quiero verlo; id vosotros... además, yo solo estorbaría ¿no?- le murmuró pícara guiñándole cómplice un ojo y su hermana sonrió maliciosa
-Está bien, quédate mirando ese estúpido partido de fútbol entonces- resolvió despreocupada besándola en la mejilla y siguiendo a Cris fuera del piso
Sentados en la oscuridad del cine, Cris miraba encandilado a Megan que no parpadeaba atendiendo a la película. Era preciosa, extrovertida y atolondrada; todo le parecía divertido y la ilusionaba como a una niña. Cuando llegó la escena más inquietante de la película, ella se abrazó fuertemente al brazo de Cris apoyándose en él miedosa, dispuesta a esconder su rostro así la escena se pusiera más cruenta
-Serás cobardica, si la película no es de miedo- le susurró burlón al oído pasándole protector el brazo por los hombros
-Pues a mí me lo está dando ¿qué pasa?- respondió amedrentada mirándolo a los ojos, Cris también se quedó mirándola fijamente. Deseaba tanto besarla… las palabras de Jake la noche anterior se repetían insistentes en su memoria: ¡¡decídete de una vez!! ¡¡Decídete de una vez...!! Sin pensárselo más, depositó en los labios de Megan un beso rápido retirándose raudo esperando su reacción. Meg lo miró sorprendida- ¡¡Vaya!!- exclamó abriendo aún más aquellos grandes ojos grises que poseía mirándolo sorprendida, Cris se mordía nervioso el labio esperando alguna otra reacción- Y... ¿No lo sabes hacer mejor? Pues menuda decepción- le reclamó burlona, él quedó un instante desconcertado y sonrió deleitado
 -A ver que te parece ahora- expuso resuelto y, sujetándole suavemente la nuca, la atrapó en un beso apasionado que ella respondió gustosa. Apenas separaron sus labios mirándose encandilados y Megan sonrió complacida
-Pues sí ¿Ves? Esto ha estado mucho mejor ¡dónde se va a comparar!- repuso melosa, se rieron alegres y volvieron a besarse. Ambos se deleitaron en saborearse gustosamente sin importarles a partir de aquel momento la película.