jueves, 14 de enero de 2016


     Los muchachos los observaron complacidos como se besaban llenos de deleite y, sonriéndose alegres, los dejaron tranquilos dedicándose a seguir enredando entre ellos jugando y armando barullo felices
-No te vayas nunca más de mi lado amor mío- le suplicó amoroso sin poder dejar de saborear aquella sabrosa boca que lo tenía hechizado
-Claro que no vida mía, a partir de pasado mañana ya estaremos juntos y para siempre, te lo prometo- respondió devolviéndole cada uno de aquellos deliciosos besos
-¡¡No!!- gritó rotundo y con voz desesperada; los muchachos sobrecogidos, los observaron intrigados- ¡No permitiré que te vayas ya de mi lado, Leni! ¡Ni esta noche ni nunca!
-Pero Josh… ¿cómo voy a quedarme a pasar aquí la noche?- expuso inquieta
-¡¿Por qué no, Leni?! ¡¿Por qué no?! ¡¡Somos adultos Helena, nadie se va a escandalizar por algo así en estos tiempos!! ¡¡Además, cada vez que te separas de mí tardo años en volver a verte, la primera vez fueron seis años; la segunda veinte…!! ¡No Leni, no permitiré que te vayas!- habló angustiado oprimiéndola a él con desesperación; ella lo escuchó muy callada y los muchachos los observaban conmovidos- Quédate conmigo amor mío, han pasado muchos años Leni, muchos esperándote... demasiados- añadió suplicante besándola con pasión en la cabeza
 -Tienes razón, sí… me quedo; me quedo hoy y para siempre- habló al fin después de unos minutos de silencio, él la abrazó aún más fuertemente contra su pecho
 -¡¡Gracias Dios mío, mil gracias!!- expuso aliviado besándola nuevamente en la cabeza y los muchachos rieron alegres
 -Pero Josh…- repuso ella y él de inmediato la apartó levemente para poder mirarla a los ojos
-¡¿Más "peros"?! Tu vida está plagada de "peros" amor mío- expuso fastidiado, ella le sonrió dulcemente posando su dedo en sus labios callándolo
-Pero… mañana, después de despedir a los muchachos en el aeropuerto, tú y yo vamos al rancho e intentarás hacer las paces con mi padre- habló melosa y tierna; él movió la cabeza muy despacio asintiendo
-Sí, mañana iremos al rancho después de despedirlos en el aeropuerto… pero, y ahora soy yo quien lo dice: PERO a buscar todas tus cosas para venirte seguidamente aquí y no volverte a ir
-¡Josh!- protestó ella mimosa
 -Cielito, soy muy feliz en estos momentos, no me lo estropees hablándome de tu padre- replicó fastidiado y volvió a atrapar apasionado aquella deliciosa boca que no se cansaba nunca de saborear
 -Parece que se lleva bastante peor con el suegro que tú con el tuyo ¿no?- bromeó Cris con Nico que sostenía entre sus brazos amorosamente a Kathy recostada de espaldas contra su pecho
 -A ver si tienes cuidado con lo que hablas que yo no tengo suegro imbécil- contestó desdeñoso haciendo una mueca asqueada con la boca
-¡¿Ah no?!- instó pícaro
-¡No idiota, no!- se chasqueó burlón
-¿Y él quién viene siendo entonces; gilipollas?- le indicó señalando con la cabeza a la pareja que observaban divertidos la pequeña discusión, Nico miró atónito a Josh que sonrió jocoso a su ahijado
-¡Ahí va la hostia!- soltó pasmado- resulta que mi padrino viene siendo mi suegro- aclaró desubicado y todos rompieron a reír explayados
-¡Pobrecilla Kathy! ¡Tienes mala suerte chiquita: te fuiste a quedar con el más tonto de los tres!- se burló socarrón Jake
-¡Ven aquí imbécil!- exclamó fastidiado y entablaron una pelea juguetona entre los tres en la que se ahogaban unos a otros divertidos. Ellas también entraron en el juego mientras Josh se sentó en los escalones de la piscina y guío a Helena entre sus piernas, la rodeó amoroso por la cintura recostándola contra su pecho; jugueteaban amorosos en enredar sus dedos observando entretenidos a los muchachos jugar
-¿Cómo son Leni?- le preguntó tierno al oído besándola cariñoso en la sien
-Preciosas y maravillosas, muy buenas… como tú- aclaró amorosa besándolo dulcemente en los labios- Megan tiene tu carácter espontáneo y atolondrado; no piensa: reacciona y habla al instante sin pararse a recapacitar ni un poco; pero es la más cobarde de las tres y la mas melindrosa: todo le da asco, no soporta ensuciarse o no ir arreglada... como dice mi padre: es el vivo retrato de mi madre- expuso cariñosa y se sonrieron enternecidos- Kathy, es la más igual a ti mi amor: es fuerte y echada para adelante, no le da miedo nada y tiene un corazón de oro pero ¡Un genio de mil demonios y no permite que nadie la pise!- clamó con rotundidad y rieron amenos- la más revoltosa es Ellie aunque no lo parece, pero también la más inteligente y sabe manipular a sus hermanas con una paciencia y ternura indescriptible; de pequeña era la que maquinaba las trastadas pero siempre convencía a sus hermanas para que fueran ellas las pobrecillas quien las realizaran y ella quedar impune, pero nunca le resultó porque yo estaba de vuelta y media- explicó con una ternura infinita y se rieron divertidos- y, aunque no es tan fuerte como Kathy, tampoco se amilana ante nada y enfrenta a quien haga falta defendiendo a sus hermanas…- se calló unos segundos- menos cuando se tiene que defender a ella misma, ahí se acobarda y calla aguantando lo que sea mi pobrecilla
 -Kathy se parece muchísimo a Adele mi vida
-Sí, lo sé; y a medida que pasan los años, cada vez más- se besaron enternecidos
-¡¡Ya volvió la burra al trigo!!- bramó enfadado Jake asombrando a todos que observaron a la pareja intrigados, se les veía acalorados- ¡¡Que es un machito Ellie, métetelo en esta cabezota cuadrada que tienes!!- le increpó dándole golpecitos con su dedo índice en la frente
 -¡¡El cabezota lo eres tú!! ¡¡Es una niña!!- le gritó ella decidida
-¡Ja!- soltó él burlón
-¡¡Ni ja ni ja!! Y solo por llevarte la contraria y hacerle caso a su tía preferida ¡¡ella va a ser una niña!!
-¡¡Ja!!- repitió más fuertemente sobre su rostro
 -Pero ¿qué importancia tiene eso?- dijo pasmado Nico por la discusión idiota que habían creado
 -¡¡Sí importa, tu hermano es un simplón machista!!- le increpó furiosa Ellie
-Te pongas cómo te pongas, va a ser un machito; convéncete de una vez mula terca
-¡¡Ja!!- le increpó ahora ella como había hecho él; de pronto e inesperadamente, Jake la atrapó con su mano impulsivamente por la nuca y la atrajo hacia él mirándola encendido
 -¡Dios, mi fierecilla! ¡No sabes cómo me pones cuando me discutes así mi chiquita linda!- murmuró apasionado y se fundieron en un beso codicioso mientras todos rompieron a reír divertidos
-¡Ahora le encuentro sentido a vuestras tontas discusiones!- dijo socarrón Nico entre risas
-¿Te recuerdan algo mi cielo?- le murmuró amoroso Josh y Helena rió amena- casi siempre empezaban porque todo te lo llevabas a la boca sin pensar: una hoja, una ramita, un papel… todo lo que caía en tus manos te lo llevabas a la boca como una niña chica- ella lo miró pícara
-Había cosas que no te molestaba tanto que me las llevara a la boca si mal no recuerdo; aun anoche no pareció molestarte demasiado- comentó traviesa, él sonrió maliciosamente complacido
-¡Ay mi niña; no me lo recuerdes o no podré contenerme!- repuso soliviantado y se besaron apasionados. Los muchachos murmuraban entre ellos mirándolos besarse con devoción mientras sus cuerpos se oprimían ambiciosos
 -Nos vamos- anunció alegre Nico acercándose a las escalinatas donde ellos estaban sentados llevando a Kathy de la mano, el resto lo seguían animados
-¿Ya?- expuso sorprendido Josh- Pero ¿no os quedáis a cenar?
 -No, nos vamos a bailar; Kathy no tuvo despedida y la vamos a divertir un poquito- expuso ameno Jake, se sonrieron todos alegres
-¿Queréis venir?- los invitó cordial Cris al pasar junto a ellos cuando Nico y Kathy ya se encontraban fuera de la piscina
 -¿Quieres ir mi cielo?- le preguntó amoroso a Helena besándola en la sien, ella denegó
-Lo sabía, era solo por quedar bien- aclaró satisfecho y todos rieron divertidos
-Chao mami, nos vemos mañana- se despidió Ellie agachándose a besar a su madre y quedó su trasero en pompa justo delante del rostro de Jake; la sujetó por las caderas y le dio un leve mordisco en un glúteo
-¡¡Ay mamasita linda, que rica esta mi chiquita!! ¡¡Me la comería toditita!!- explotó al tiempo
-¡¡Jacob!!- protestó ella y todos rieron divertidos
 -Boba sería si no se dejara- comentó Helena y todos la miraron pasmados
 -¡¡Mamaita!!- repuso boquiabierta Ellie, su madre sonrió amena
-Mi niña, si llego a saber por aquel entonces muchas cosas ¡Iba a esperar a casarme!
-Tampoco recuerdo habértelo propuesto- indicó Josh besándola en el pelo
-¡Cierto!- expuso ella desconcertada y lo miró curiosa- ¿Por qué?
-Por imbécil mentecato, aunque de aquella se nos llamaba “caballeros”… era más fino- expresó chistoso y todos rieron divertidos.
Los muchachos se fueron a cambiar. Ellos oían el jolgorio que provenía del piso superior en silencio aún dentro de la piscina; Helena, recostada gustosa contra el pecho de Josh, enredaba mimosa sus dedos a los de él
-Josh...- expresó de pronto Helena
-Dime mi vida- repuso besándola amoroso en la sien
-¿Cómo es que Kathy ya estuvo aquí? ¿Acaso os habéis estado viendo?- indagó llena de curiosidad, él sonrió divertido
 -No mi hermosa; tanto ellas como yo nos enteramos de toda la verdad la víspera de la boda- aclaró sincero pero no pudo evitar sonreír pícaro y ella entrecerró desconfiada los ojos mirándolo escéptica por aquella pilla sonrisa provocando que él soltara una carcajada animada- de verdad mi ángel, no miento; solo que... creo que nuestro nieto fue engendrado aquí- le susurró malicioso al oído, ella abrió atónita los ojos y se rieron entretenidos
-Te llevas muy bien con ellos ¿verdad?- expresó complacida
-Sí, los quiero con locura- respondió con pasión y ella sonrió tierna- ¡¿y a mi algodón de azúcar?! ¡Ay mamasita, esa chiquita me lleva de calle! ya verás cuando la trates más: es tan dulce y cariñosa que enamora a cualquiera
 -Se parece mucho a Lupita
-Sí, es igualita a ella; tiene un corazón tan grande que no le cabe en el pecho a mi Lupe bella- se sonrieron tiernos- a veces me quedo mirándolos embobado a ella y a Ben, se aman cada día más, tienen una familia maravillosa y son tan felices con tan poco mi cielo; me dan una envidia terrible, siempre pienso que nosotros podríamos haber sido ellos- expresó sincero, se miraron pesarosos y se sonrieron conmovidos
-¡Bueno, ya estamos listos y nos vamos!- exclamó Cris apareciendo en el jardín seguido del resto
-Mañana sale el vuelo a las once, no os retraséis- les recordó Nico
 -No te preocupes hijo, allí estaremos
 -Entonces nos vemos mañana en el aeropuerto y podemos regresar juntos al rancho- propuso animado Jake
-¡¡Pero antes tendremos una sesión de compras las mujeres!!- recordó Megan entusiasmada provocando las risas de todos
-¿Vosotros regresáis al rancho?- preguntó desconcertado Josh
-Sí; Cris solo pudo pedir un día y se regresará a la noche con papá, pero yo me voy a quedar a echar una mano esta semana por la marcha de Kathy; me deben unos días de vacaciones y me los voy a cobrar ¡No vaya a ser que en una de estas me vuelen la cabeza y no las haya disfrutado!- bromeó desenfadado
 -¡¡Eso no lo digas ni de broma ¿me oyes?!!- le reprochó sobrecogida Ellie palmeándole molesta la espalda, él la atrapó entre sus brazos apretándola contra su cuerpo mientras reía divertido
-Aunque no quieras reconocerlo porque eres una cabezona testaruda, me quieres un poquito ¿verdad?- expresó meloso mirándola enamorado, ella rió derrotada y todos rieron divertidos
-Bueno, ahora sí que nos vamos que se hace tarde- resolvió presuroso Cris
-Os acompaño- dijo amable Josh y besó a Helena en la sien- no te muevas de aquí mi sol, ahora regreso; quiero mostrarte una cosa- le murmuró meloso y se fue con ellos
 Regresó al rato, traía una botella de champán y dos finas copas que llenó y le entregó una, ella sonreía feliz mientras él retomaba su lugar detrás de ella recostándola sobre su pecho; ella vio una cajita que dejaba junto a la botella
-¿Qué es eso?
-No me seas curiosa y espera- la besó amoroso en los labios- desde aquella tarde antes de irme a Pearl Harbor, soñé con hacer una cosa y voy a cumplirla hoy… mira- expuso cariñoso guiando su mirada al frente; un hermoso atardecer se veía desde donde estaban; el cielo enrojecido se iba oscureciendo dejando una bella estampa, cuando casi el sol se ocultaba tras las montañas aquello era deslumbrante
-Es precioso...- murmuró deleitada- ¿pero qué tiene que ver la cajita con esto?- indagó precipitada mirándolo llena de curiosidad
 -¡¡Serás impaciente, carajo, espera un segundo!!- expresó desenfadado besándola tierno en la sien y ella rió entretenida- Ahora es el momento: toma mi vida- y mostró un precioso anillo con un impresionante diamante
 -¡Dios mío, Josh!- expuso maravillada- pero cielo, si aún tengo el que me entregaste la primera vez
-No importa; ese pertenece al pasado, este significa un futuro junto a ti para siempre; cásate conmigo Leni- le dijo colocándoselo en el dedo, ella lo miraba encandilada- casémonos ya, sin esperar nada; el martes tengo que estar en Washington, pero si salimos mañana y paramos en Reno que nos queda de camino, llegamos a Washington casados- explicó con resolución, ella lo miró pasmada
-De aquí a Washington corazón… ¿En qué momento Reno nos queda de camino?- indicó chistosa ella
-¡Según el camino que cojamos cielo!- expuso tranquilamente- si tomamos un vuelo de aquí a Reno y luego otro de Reno al J.F.K. ¿queda o no de camino?- ella soltó una sonora carcajada
-Sí, así sí- repuso entre risas alegres, él también rió oprimiéndola contra su cuerpo amorosamente- pero mi amor… lo siento pero tengo que contestar que no- expuso muy pausadamente, él la retiró levemente y la miró a los ojos muy serio- no te confundas, sí quiero casarme contigo cielo… ¡¡lo llevo deseando años!!- expuso rauda y rotunda, él sereno su rostro- pero no iremos a Reno mi amor
-¿Qué estás haciendo Leni? ¿Comprobando si mi corazón funciona bien cielo? Pues no hace falta, ya te digo yo que sí, me hacen pruebas médicas a menudo- expuso fastidiado y ella volvió a reírse animada tomando su rostro entre sus manos lo besó dulcemente en los labios
-Lo que quiero decir es que voy contigo a donde quieras mi vida, pero no quiero casarme así; necesito a mis niñas contigo en ese día y a Lupe; supongo que tú no querrás dar ese disgusto a Lupita, lleva muchos años esperando esto ¿serías capaz de hacerle una cosa así?- él sonrió cariñoso
-Vale, de acuerdo; pero lo primero que haremos en cuanto regresemos es casarnos- remarcó rotundo
-Eso ni lo dudes- aseveró decidida y se besaron pausadamente, deleitándose en saborearse
 -Y lo segundo ponerle sus verdaderos apellidos a las niñas, no las quiero ni un segundo más con ese que llevan- aclaró tajante, ella sonrió feliz y se besaron nuevamente, él acariciaba su cuerpo despacio subiendo por su espalda, introdujo sus manos por debajo de los tirantes del bañador y las llevó hasta sus hombros; la miró a los ojos- Y ahora señora Hunter déjeme desenvolver mi regalo- murmuró meloso mientras tiernamente le acariciaba los hombros retirándole al tiempo el bañador
 -¿Señora Hunter? Aún no lo soy
-Lo eres para mí desde hace treinta y tres años y así te presentaré en Washington; así que vaya acostumbrándose a escucharlo señora Hunter- remarcó decidido, se sonrieron complacidos y se besaron de nuevo, él acabó de retirarle el bañador hasta la cintura y se detuvo a deleitarse contemplándola, sonrió satisfecho- como dice el descarado de Jacob: ¡¡Ay mamasita que rica está mi chiquita!!- expuso encantado y se rieron divertidos al tiempo que sus bocas se encontraban de nuevo y se besaban gustosos mientras sus manos se recorrían complacidas acabando de retirarse sus bañadores.
Helena disfrutó de nuevo de una espléndida sesión de amor que él le regaló llena de ternura y dedicación que la enloqueció como siempre hacía. Aquel hombre era todo cariño y pasión que le donaba a manos llenas llevándola hasta un séptimo cielo del que no quería descender nunca más. La edad no hiciera mella en su impetuosidad que la hizo gozar hasta límites increíbles; cada roce de su boca en su cuerpo le expresaba todo cuanto la amaba y ella también se entregó totalmente demostrándole que él era el único hombre de su vida y siempre lo sería
 Recostada sobre su pecho, apreciando sus tiernas manos acariciándole la espalda y sintiendo como cada poro de su piel se deleitaba con cada roce de ellas, casi se quedaba dormida
-Vamos mi estrellita del norte o cogerás frío y no quiero que te resfríes - le murmuró amoroso, ella sonrió complacida del deleitoso escalofrío que le recorrió el cuerpo al sentir su melosa voz en su oído
-Estoy tan bien así- indicó plácidamente oprimiéndose gustosa contra su cuerpo, lo miró a los ojos y se sonrieron deleitados- no quiero moverme de aquí nunca más, quiero estar así para siempre
-Claro, como tú eres una sirena no tienes problemas, pero yo soy un humano corriente mi cielo y me estoy quedando como una uva pasa, mira- expuso chistoso mostrándole su mano cuyos dedos estaban arrugados ya del contacto del agua
 -¡Uhmm, uvas pasas; que ricas!- repuso juguetona metiéndoselos en la boca y se los lamió provocadoramente, él rió complacido
-¡Anda, deja de enredar y vamos que tienes tú un peligro...!- repuso tierno y, riéndose felices, salieron de la piscina tomados de la mano; él la envolvió meloso en una toalla al tiempo que la besaba apasionado en la boca- la amo señora Hunter
-Y yo a usted señor Hunter, no sabe usted cuanto- expresó deleitada, rieron felices y entraron en la casa
 Inconscientemente estiró su mano buscando a Josh a su lado pero no lo encontró y se despertó sobresaltada
-¿Josh?- pronunció sentándose sobre la cama y observó la puerta del baño pero estaba abierta y la luz apagada; se levantó y salió al pasillo- ¿Josh?- volvió a llamarlo asomándose a la barandilla que daba al recibidor de la casa mientras también examinaba nerviosa con la mirada las otras puertas del piso de arriba, pero siguió sin respuesta; ya muy inquieta descendió por las escaleras al piso inferior- ¿Josh, dónde estás?- gritó impaciente sintiendo ya pánico
-Estoy aquí mi cielo- le contestó tranquilamente desde la habitación del fondo del recibidor, ella corrió hacia su voz y lo encontró detrás de la mesa de su despacho, él le sonrió tierno al verla aparecer- ¿que pasa mi án...?- pero no le dio tiempo a acabar de hablar, ella se lanzó a sus brazos aferrándose ansiosa a su cuello y él instintivamente la rodeó con sus brazos- ¡Ey mi chiquita ¿qué te ocurre?!- exclamó sobrecogido al percibir su cuerpo tembloroso
 -Me asusté al no encontrarte en la cama, pero cuando no me contestabas… ¡¡me aterré!!- sollozó espantada, él sonrió enternecido y la besó amoroso en la mejilla
-Mi niña hermosa ¿creías que era yo el que ahora te abandonaba?- bromeó dulcemente y ella le golpeó suavemente en la espalda con su mano, él rió divertido oprimiéndola más fuerte contra él- mi estrellita, nunca podría hacer tal cosa mi vida, tú lo eres todo para mí- aclaró con pasión, se miraron con gran amor y se besaron complacidos- vuelve a la cama mi vida, es muy temprano aún; no son ni las cinco
-No sin ti- respondió mimosa sentándose sobre sus rodillas y recostó su cabeza sobre su hombro, él sonrió deleitado, la besó tierno en los labios y continuó escribiendo en el ordenador
-¿Qué haces?- indagó sin moverse
-Arreglando unos papeles que necesito mandar urgentemente antes de irnos a Washington mi sol- explicó despreocupado sin dejar de trabajar
-¿Y son muy importantes?- siguió indagando enredando con su pecho velludo, le encantaba acariciarlo y sentir aquellos rizos suaves entre sus dedos
-Mucho cielito
-¿Tanto que no pueden esperar a mañana?- repuso mimosa besándolo ardorosa en el cuello mientras bajaba su mano por su vientre duro en una tierna caricia
-Ya acabo estrellita, de verdad que sí son importantes- contestó intentando concentrarse en lo que escribía pero las caricias de Helena lo descentraban
-¿Más qué yo?- siguió indagando pícara metiendo su mano en su pantalón de pijama y acarició excitantemente su miembro
-Leni, cielo…- expuso él en un intento de protesta pero ella lo miró ardiente mientras seguía con su provocadora acaricia en su miembro que ya estaba completamente erecto; sonrió gozoso y apagó el ordenador- ¡Ya está!- resolvió de pronto y se rieron divertidos; se besaron apasionados al tiempo que él la tomaba en brazos y se la llevó arriba sin separar sus bocas que se entregaban ambiciosas- sigues tan revoltosa como a tus 28, gatita- comentó deleitado dejándola suavemente sobre la cama y actos seguido se recostó sobre ella atrapándola bajo su cuerpo
-Me siento como si aún los tuviera- aclaró satisfecha rodeándole el cuello con sus brazos, se rieron jocosos mientras volvían a disfrutar de sus bocas. Fue de nuevo una entrega pasional y ardiente, sin perder ni un mínimo de ternura y dedicación en complacerse mutuamente. Ella seguía siendo su fierecilla salvaje que siempre le reclamaba ambiciosa de más y sabía cómo mover su precioso cuerpo para conseguirlo ayudada de aquellas delicadas caricias que nunca erraba donde realizarlas precisa hasta arrastrarlo siempre a una excelente demencia que lo enloquecía y lo llevaba hasta lo máximo del placer a donde él intentaba trasladarla consigo sin demora consiguiendo que ambos obtuvieran todo lo ansiado con la máxima complacencia
-Sigues siendo mi gatita apasionada, escandalosa e inagotable de siempre- le murmuró embelesado recostándose rendido a su lado mientras ella se acomodaba gustosa entre sus brazos
-Y tú mi amo complaciente que siempre me da lo que deseo- respondió satisfecha, se rieron encandilados mientras se besaban apasionados. Poco a poco se durmieron fatigados de la deliciosa y extenuante nueva entrega de placer
 Los ladridos de un perro lejano lo despertó, fastidiado por aquella inoportuna interrupción de su sueño, examinó su reloj aún adormilado pero lo que vio lo despertó al instante
-¡¡Dios, Leni; que no llegamos!!- exclamó alarmado sentándose presuroso al borde de la cama
-¡¿Qué?!- exclamó sobresaltada, levantando la cabeza de la almohada
 -¡Qué no llegamos cielito, queda escasamente una hora para que despegue el avión de los muchachos!- avisó acelerado metiéndose ya en el baño, ella lo siguió al momento y se metió en la ducha junto a él dándose una rápida enjuagada- Deja eso ahora mi vida, lo haremos a nuestro regreso- expresó apurado al verla deshacer la cama mientras él se abrochaba ya los botones de su camisa
 -No estoy haciendo la cama Josh, estoy buscando mi sujetador que no lo encuentro- le indicó nerviosa
 -¿Para qué lo quieres? No lo necesitas mi bien; aún tienes todo muy bien y en su sitio- respondió desentendido subiéndose la cremallera de sus vaqueros, ella se detuvo y lo miró socarrona
-¿A qué va a ser cierto eso de que el amor es ciego?- expuso burlona, él le soltó un gruñido juguetón dando un paso adelante como si fuera a lanzarse encima de ella y Helena soltó un chillido travieso, se rieron alegres
-Mira en el baño de abajo cielo, ayer te has puesto el bañador allí- expuso sentándose en el banco que había a los pies de la cama para calzarse sus deportivas
-¡Ah, es cierto!- recordó animada y corrió a la puerta, él le dio una cachetada suave al pasar junto a él y ella soltó otro chillido retozón dando un ligero saltito para escapar de él alcanzando la puerta
-¡Apura desmemoriada o no llegaremos!- repuso cariñoso mientras reían felices
Corrían por la terminal en busca de la puerta de embarque, él tiraba suavemente de su mano
-Apura mi sol o te juro que no llegamos- la apuró al ver que se detenía
-¡Voy, es que se me cae el zapato!- expuso intentando calzarse de nuevo su zapato izquierdo
 -¡¿A qué te voy a tener que llevar en brazos?!- dijo chistoso y se rieron divertidos
Al fin los encontraron, ellos sonrieron divertidos al verlos acercarse apurados
-Mami, creí que ya no llegabais- expresó sobrecogida Kathy abrazándose a su madre
-Nunca me esperé verte llegar tarde padrino ¡Y sin afeitar!- comentó alegre Nico abrazándose a él
-Nos quedamos dormidos hijo- expuso Josh devolviéndole cariñoso el abrazo
-¡Anda la hostia! ¡Y yo no me esperaba oír eso del hombre más puntual de la tierra!- soltó guasón Jake provocando las risas de todos
-No nos dio tiempo a nada mi niña- dijo Helena sofocada aún de la carrera- mírame, sin maquillar siquiera- expuso abochornada, sus hijas la miraron y sonrieron felices
-Pues estás preciosa mami- aclaró satisfecha Megan
-Sí, se te ve radiante mamaita- añadió feliz Ellie y se sonrieron las cuatro dichosas abrazándose de nuevo en un abrazo colectivo
 -¡Ay mi chiquita, nunca nos hemos separado mis niñas!- lloriqueó angustiada Helena apretando aún más aquel abrazo. La voz de una joven anunció el vuelo por megafonía
-Es el nuestro gatita, debemos irnos- avisó Nico a Kathy pero Helena no soltaba a su niña
-Ten mucho cuidado que allí hace calor; bebe mucho, pero agua embotellada que nunca se sabe… y descansa, descansa bastante que estás en la parte más peligrosa del embarazo- le recomendó llorosa posando tierna sus manos en las mejillas de su hija mayor
 -No que aquí en Carolina no hace calor mamaita- respondió conmovida por el enorme amor de su madre
-Bueno, tú ya me entiendes mi cielito: que te cuides, que te quiero mucho y te voy a extrañar un montón- resolvió casi entre lágrimas
 -Sí mami, yo también te quiero y te echaré mucho de menos- aclaró tierna Kathy
 -Mentirosilla, si todo va bien y supongo que sí, ni te acordarás de nosotros- repuso cariñosa y la volvió a abrazar fuertemente contra ella mientras todos reían amenos. El anuncio del vuelo volvió a sonar por los altavoces
 -Vamos Leni, déjala irse o perderán el vuelo mi cielo- expuso tierno intentando separarlas. De pronto, un poderoso grito de Megan los sobresaltó a todos y la miraron sobrecogidos al instante
-¡¡Mirar que preciosidad de anillo lleva mamá!! ¡¡Es realmente una delicia mami!!- exclamó entusiasmada tomando la mano de su madre para observar mejor el anillo de compromiso que llevaba en el dedo
-¡¡Oh por Dios bendito Meg, me has asustado de verdad, hija!!- expresó suspirando profundamente su madre para sobrepasar el pánico momentáneo que había sufrido, aunque sonreía feliz mirándola tan emocionada por la noticia
 -Esta niña no tiene remedio, Virgen Santa- protestó fastidiada Ellie moviendo reprochadora la cabeza de un lado a otro y todos rieron entretenidos
-Ahora sí nos vamos- resolvió decidido Nico llevándose a Kathy de la cintura al túnel de embarque
-¡Cuídamela mucho Nico, por Dios te lo pido!- le gritó ya sin poder detener las lágrimas
-¡Por la cuenta que me tiene suegrita, no se preocupe!- respondió feliz sin detener su paso
 -¡Llama en cuanto lleguéis!
-Lo haré mami- respondió también entre lágrimas y los perdieron de vista
 -Cuídamela mucho Diosito- murmuró entre lágrimas desoladoras
-Mamaita- se abrazó consoladora a ella Ellie, también lo hizo Megan
-Si va de luna de miel mamaita, lo va a pasar divino- comentó alegre Megan también abrazándola como Ellie hacía
 -Lo sé mis niñas, si lo sé… pero es la primera vez que una de vosotras se va tan lejos y no puedo superarlo- comentó disgustada acariciando amorosa las cabezas de sus hijas; ellos las observaban enternecidos
-Ven aquí mi gallinita clueca- dijo tierno Josh recogiéndola entre sus brazos y ella lloró contra su pecho- no siempre iban a estar bajo tu ala cielo, tienen que volar tarde o temprano
-Sí, lo sé... ¡Pero que no vuelen lejos, Josh!- aclaró rotunda mirándolo temerosa- las necesito tener siempre cerca, siempre- expresó conmocionada y todos rieron enternecidos; Josh la oprimió tierno contra él y ella se aferró aún más a su cintura
-No te preocupes mi vida, nunca dejaremos que se alejen demasiado, te lo prometo- expresó compasivo besándola amoroso en el pelo y se la llevó entre sus brazos hacia la salida del aeropuerto; los muchachos abrazados cada uno a su pareja los siguieron. Luego Megan y Ellie se llevaron a su madre de compras como habían decidido y los muchachos junto a Josh regresaron a la casa.

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