La mirada oculta de Eva

     Caminaron hacia la salida, los muchachos charlaban animados entre ellos mientras Joseph sin embargo iba muy callado. Su cabeza no dejaba de vueltas intentando asimilar todo aquello sin ningún éxito ¿qué broma macabra era aquella del destino? ¿Por qué tenía que aparecer de nuevo esa maldita mujer en su camino? ¿Es que no le había hecho ya bastante daño o qué? Pero lo más increíble y por más vueltas que le daba no podía llegar a encontrarle explicación era a lo de Kathy... y volvía a observarla de refilón sin poder creer lo que veía, era impresionante el parecido de aquella muchacha con su hermana Adele... ¿qué narices significaba aquello? ¿Qué rayos estaba pasando? ¿El mundo se había vuelto loco de repente o era él el que estaba perdiendo la cabeza? Y volvía a observar disimuladamente a Kathy mientras ella seguía hablando despreocupada con los demás
-¿Qué dijo la doctora mi bien?- le preguntó Nico besando tierno la sien de Kathy que la llevaba rodeada por la cintura con su brazo acogiéndola tierno contra su cuerpo
-Todo está bien, tranquilo- respondió mirándolo amorosa, él sonrió satisfecho- ¿quieres verlo?- expresó ilusionada y él abrió entusiasta los ojos
 -¿Podemos ya?- exclamó emocionado y ella asintió con la cabeza sacando una foto de su bolsillo trasero del vaquero que él recogió y, sonriendo encandilado, la observó detenidamente al tiempo que Jake se apresuraba a acercarse a él para verla también
-Joder tío ¿tú distingues algo? Porque yo no veo nada más que rayajos carajo- repuso fastidiado y él resopló derrotado indicando que tampoco observaba nada; Kathy y Ellie rieron divertidas atrapando de nuevo la mirada de Joseph ¡¡Dios, Ellie era igualita a Leni carajo; hasta tenía su preciosa y alegre sonrisa que sonaba como dulces cascabeles!!
-Aquí ¿lo veis? Esta es su cabecita y este manchón algo mas oscuro su corazoncito que late fuerte y rítmico como debe ser- les indicó deteniéndose para señalárselo
-¡Ey, padrino ¿quieres conocer a tu nuevo ahijado?!- expuso eufórico mirando entusiasmado a Joseph que abrió atónito sus preciosos ojos grises
 -¿Cómo que mi nuevo ahijado? ¿Qué has hecho desgracia humana?- expresó asombrado y él le sonrió dichoso
-Embarazarnos padrinito, era la única manera de que esta fierecilla aceptara casarse conmigo y aún así tuve que dejarme atrapar por un montón de escombros porque la muy cabrita aún no se decidía a darme el sí- bromeó guasón
 -¡Serás idiota!- exclamó Kathy golpeándolo con su puño en el ante brazo, todos rieron jocosos
-Me alegro mucho por vosotros, muchachos- expresó amoroso abrazándolos cariñoso a ambos; a Kathy su corazón empezó a latirle frenético al sentirse cobijada tan tiernamente contra aquel pecho y no podría explicar cómo pero sintió al instante en todo su ser y en cada milímetro de todo su cuerpo que aquel era su padre, no podía estar equivocada...
-La boda será cuanto antes, como mucho un mes, así que ve haciendo sitio en tu apretada agenda porque cuento contigo como mi padrino de boda ¿eh?- explicó resuelto Nico, él solo sonrió dulcemente- Ah, pero que aún no se entere Lupita ¿vale mi cuate? Eres el primero en saberlo aparte de los muchachos y quiero hacer bien las cosas padrino- aclaró decidido y él le sonrió satisfecho
-Por supuesto hijo, tranquilo que Lupita no sabrá nada por mí- respondió sincero apretándole suavemente el antebrazo al tiempo que miraba dulcemente a los ojos de Kathy que también lo observaba con gran ternura en aquellos preciosos y expresivos ojos grises mostrando una sonrisa preciosa; unas ganas inmensas de abrazarla de nuevo le asaltaron- espero... no, sé que vais a ser muy felices y que tendréis un niño precioso- expuso alegre aprovechando para abrazarlos a ambos de nuevo, pero esta vez aprisionó disimuladamente aún más a Kathy contra su pecho intentando aplacar algo aquellas inexplicables ansías tremendas de sentirla entre sus brazos
-¡Haaala; otro como Jake, pero seréis machistas!- exclamó fastidiada Ellie provocando una sonrisa pícara en Jake, Joseph la miró confundido pero sin soltar a Kathy de entre sus brazos- ¡¿Y por qué no va a ser una niña, vamos a ver?!- repuso mirándolo resuelta poniendo sus brazos en jarras, él la miró divertido sin poder contener una sonrisa enternecida y la rodeó impulsivo con su brazo libre atrayéndola también contra su pecho como aún sujetaba a Kathy y la besó amoroso en la cabeza; ambas hermanas se miraron a los ojos y sonrieron tiernas
-¡Ya volvió la burra al trigo! ¡Qué es un varoncito Ellie, métetelo en esta terca cabecita!- aclaró decidido Jake golpeándole suavemente la sien con su dedo índice
-O una niña- remarcó tozuda
-¡Y dale! Pero ¿Habéis conocido chamaca más cabezona y terca?- expuso chistoso sujetándole la cabeza y besándosela amoroso también
-Yo sí, muy muy parecida- contestó nostálgico Joseph y se quedó muy callado y abstraído con la mirada perdida a través de las puertas de cristal de urgencias; los cuatro muchachos se miraron conmovidos sin atreverse a interferir en aquel breve instante en que Joseph estaba sumergido en sus pensamientos. Leni, su dulce Leni... cuánto la extrañaba aún por Dios santo ¿es qué nunca podría olvidarse de ella demonios?... De pronto, como saliendo de golpe de su abstracción, tomó aire profundamente y besó tierno la cabeza de ambas muchachas- será mejor irnos, nos estamos retrasando mucho y tu madre estará intranquila- resolvió secamente casi rozando la brusquedad retirando sus brazos de los hombros de Kathy y Ellie y se encaminó decidido hacía la puerta de salida. Los muchachos, sin entender muy bien qué había pasado para aquel inesperado cambio de Joseph, volvieron a cruzarse una mirada confundida y sin decir nada lo siguieron.
 Lupita se abrazó a Nico con desesperación al verlos llegar y de nuevo volvió a romper a llorar desconsolada
-Menos mal que ya llegasteis, no hay manera de calmarla- habló conmovida Megan y Nico le sonrió dulcemente al tiempo que, con una ternura inmensa, se fue llevando amoroso a su madre entre sus brazos hasta el sofá donde se sentaron e intentó serenarla con dulces palabras y tiernos besos en su frente mientras la acunaba suavemente sujetándola contra su pecho mientras todos en silencio los observaban conmovidos.
 Menos Joseph, que observaba a las tres hermanas ahora juntas y examinaba minuciosamente el rostro de Megan; aquella muchacha también tenía gran parecido con Helena pero no tanto como Ellie que había heredado sus mismos ojos melosos y aquella dulce e inocente sonrisa que encandilaba… pero lo que lo descoló completamente y ya no sabía que explicación encontrarle eran a los ojos grises grandes y expresivos que aquella muchacha poseía iguales a los de su hermana Kathy y, por lo tanto, iguales a su hermana Adele y él mismo ¿qué coño pasaba allí? No entendía nada...
 -¿Sorprendido hermano?- expresó ya más tranquilo Ben tras acercarse a él
 -¿Por qué nunca me dijisteis que seguíais en contacto con ella?- preguntó dolido mirándolo atormentado
-Porque no es así Josh, desde aquel maldito día en el rancho, nunca más supimos de ella hasta este sábado… cuando los muchachos nos presentaron a las chicas- le explicó serenamente- ¡¡Dios compadre!! Nos quedamos de piedra; quien nos iba a decir que los muchachos acabarían enamorándose de las hijas de Helena… cosas del destino, supongo
-¿El destino hermano? Un destino bastante hijo de puta conmigo ¿no crees?- masculló asqueado, Ben se quedó callado sin saber qué decirle- ¿No le llegó con todo lo que me hizo sufrir ya que aún quiere más? ¿No se divirtió bastante a mi cuenta? ¡¿Qué más quiere de mí ese puto destino Ben?!- clamó desesperado y se miraron a los ojos, Joseph estaba completamente desamparado y a Ben se le rompía el alma verlo así
-Compadre, tranquilo…- musitó conmovido posando tranquilizador su mano en el hombro de Josh
-¡¡Tranquilo no Ben!! ¡¡Dime tú ¿Qué cojones quiere ese puto destino de mí ahora para volver a poner en mi camino a esa maldita mujer?!!- bramó fuera de sí y todos lo miraron impresionados- ¡¿Por qué carajo viene a remover todo de nuevo cuando ya empezaba a apagarse?! ¡Explícamelo porque yo no llego a entenderlo Ben!! ¡¿Acaso se aburre y ha dicho: vamos a tocarle los cojones un poco más a Joseph no vaya a ser que olvide y logre ser un poquito feliz?!- expuso amargamente, Ben tragó incómodo saliva sin saber qué responder; Joseph se percató de que todos lo estaban mirando y se escabulló a la cocina con paso apurado dejando a Ben cabizbajo y con rostro abatido
-¿Qué le pasa al padrino pá?- preguntó inquieta Lucía, Ben levantó la cabeza encontrándose con la mirada compungida de Lupe que lo había comprendido todo y ambos no pudieron evitar que sus ojos se inundaran de lágrimas conmovidos por el dolor que sentía en aquellos momentos su querido y buen amigo
-Nada mi chiquita bella… el destino le acaba de dar un duro revés que no se esperaba- respondió soltando un profundo suspiro y miró abatido a las tres muchachas que también lo observaban inquietas por lo que habían escuchado
 -Ve con él mi rey, no lo dejes solo con esos fantasmas rondándole la cabeza- indicó atormentada Lupe, él asintió con la cabeza y también entró en la cocina quedándose el resto muy callados en la sala
-Bueno... ¿alguien puede decirme quién es ese hombre y por qué nos mira así a nosotras tres?- no pudo resistir más la curiosidad Megan rompiendo por fin aquel incómodo silencio
-¿No lo reconociste por la foto, Meg? Ese es Josh, el que pudo haber sido nuestro padre- le aclaró pausadamente Kathy, ella abrió perpleja los ojos
-¡Ooohh, es ese!- expresó asombrada y se mordió levemente el labio inferior- ¡¡Ah!! Pues está muy bien ¿no? madurito pero muy atractivo- resolvió desenfadada provocando unas sonrisas en el resto
-Meg, por Dios bendito ¿tú no las piensas cuando hablas, verdad?- le recriminó Ellie
-¡¿Qué?! ¡¿Acaso me vas a decir que no es cierto?!- la encaró desenvuelta, Ellie movió derrotada la cabeza- ¡¡Que pena ¿no?!! pues sí que presumiría yo orgullosa si fuera este mi papá y no el imbécil que nos tocó en suerte- soltó con tal desenvoltura que los demás no pudieron contener la risa
-¡¡Por favor Megan!!- le regañó esta vez Kathy mirándola reprochadora- tiene razón Ellie: no sabes contener la lengua; así que mejor nos vamos no vaya a ser que ese pobre hombre regrese y sueltes alguna barbaridad haciéndoselo pasar más mal de lo que ya lo está pasando- añadió conmovida y besó cariñosa la mejilla de Lupe; Ellie la imitó
-Espera Kat- comentó rápidamente Megan sentándose a lado de Lupita y le tomó tierna la mano entre las de ella- Lupita, es un hombre fornido y se le ve orgulloso y decidido... ¿por qué rayos no enfrentó al abuelo y permitió que se saliera con la suya?- interrogó sumamente contrariada
-Por respeto mi niña, por respeto y muchísimo amor hacia vuestra madre- contestó cariñosa acariciando dulcemente la mano de Megan que sujetaba la suya- él respetó su decisión como todo un caballero, se tragó su orgullo y se alejó como ella le pidió
 -¡Que idiota!- soltó con desparpajo y Lupita sonrió amena- ¡Lo que debió hacer es tomarla en brazos y llevársela de allí ante las narices del abuelo! ¡Ahí te quedas viejo carcamal, cásate tú con ese pringado si tanto te interesa!- explicó rotunda y desenvuelta, todos rieron divertidos ante tal explosión de entusiasmo
-Anda vamos que eres imposible y que sepas que te voy a confiscar todas esas películas románticas que tienes así lleguemos al rancho, te vuelven de un fantasioso que no hay quien te aguante- resolvió Kathy tomándola del brazo y levantándola del sofá mientras los demás reían explayados
-¡Espera mujer; déjame despedirme ¿no?!- protestó soltándose de su amarre y se inclinó ante Lupe- nos vemos el sábado Lupita, ahora descansa y tranquilita que ya ves que tu virgencita ha cuidado de Nico y está bien- se despidió con ternura de la buena mujer besándola en la mejilla
 -Gracias mi niña, y digan lo que digan tus hermanas, no me cambies mi ángel: tu desparpajo es hermoso mi chiquita- expuso dulcemente posando tierna su mano en la mejilla de Megan que sonrió complacida- que la virgen de Guadalupe os cuide y proteja también a vosotras, mis niñas- se despidió de ellas persignándolas con cariño
 -¿Ya os vais muchachas?- repuso Ben regresando con Joseph a la sala, parecía mucho más calmado y sereno
-Sí, se nos hace tarde y quedaron todos preocupados en la casa por Nico- indicó cordial Kathy
-¡¿Todos?!- repitió sarcástico Joseph- ¡¿De un simple bombero?! O mucho cambió ese viejo o no me creo nada- añadió hiriente, todos lo miraron incómodos y él se arrepintió al instante de sus palabras- perdonar muchachas, no fue mi intención lastimaros a vosotras… pero me inquieta mucho estas relaciones; temo que podáis acabar sufriendo todos por ese viejo orgulloso- expuso preocupado
-No que va, el abuelo ya los conoce y está encantado con ellos ¿verdad chicas? Siempre está preguntando a ver cuando regresan; sobre todo tú Nico, que lo enamoraste con tu conocimiento sobre caballos y de pronto parece que ya no sabe hacer nada sin preguntarle antes a “su Nico” ¿a qué sí, Ellie?- expuso resuelta Megan con su habitual desparpajo mirando al muchacho que sonrió agradado por aquellas palabras mientras el resto reía divertido
-Pues sí que cambio el viejo, sí…- repuso sorprendido Joseph- bueno, pues me alegro mucho por vosotros- expuso mirando cariñoso a Kathy que no dejaba de observarlo fijamente; ambos se quedaron mirándose expectantes… de pronto, ella le ofreció una preciosa sonrisa alegre y sin esperárselo él, lo besó en la mejilla percibiendo como él suspiraba conmovido por aquel tierno detalle. Sus hermanas la imitaron también con toda naturalidad
-Ahora sí nos vamos- indicó resuelta Kathy
-Llamad al llegar mis niñas, la noche está muy oscura hoy y no es buena señal- las avisó Lupe y ellas asintieron ofreciéndole una cariñosa sonrisa; los muchachos y Lucía las acompañaron hasta el coche quedándose solos los adultos en la sala. Joseph tomó asiento en uno de los sofás frente a Lupe y encendió un cigarrillo que se lo fumó muy callado y abstraído. Ben se sentó junto a su esposa y se quedaron en silencio dejándolo digerir todo lo que había sucedido hasta que entraron los muchachos charlando amenos y lo sacaron de sus cavilaciones. Suspiró profundamente y apagó su cigarrillo con firmeza como si, con ese gesto, pudiera borrar todo aquel pasado que lo torturaba
-¿Te quedas con nosotros a pasar la noche, verdad compadrito?- le preguntó cariñosa Lupe
-No, muchas gracias mi Lupita bella pero me voy a casa; me subí al helicóptero al instante de recibir la llamada de Ben y estoy deseando refrescarme y quitarme el uniforme de una vez, además, debo regresar mañana mismo sin falta y antes de irme quiero ver cómo está todo
-Por la casa no te preocupes que sabes que, si no son los muchachos somos Lupe y yo, vamos a menudo a mantenerla en condiciones y todo está en orden- lo animó Ben; sabía la respuesta, pero así a todo lo miró interesado a los ojos- no, tampoco tuviste correo a no ser facturas compadre- Le respondió ya sin necesidad de más palabras- ¿qué estás esperando siempre con tanta ansia?- preguntó desconcertado como siempre hacía
-Nada- murmuró apesadumbrado volviendo a quedarse ensimismado; Ben tenía razón ¿qué rayos seguía esperando? ¿por qué seguía como un estúpido esperándola a pesar de todo? Pasaron veinticuatro años desde aquella maldita llamada de teléfono y nunca más supo de ella ¿cuánto tiempo más necesitaba para comprender que Leni no iba a regresar nunca a si lado? Pero le era imposible, era más fuerte que él, seguía torturándose esperando su regreso o algún aviso de su parte diciéndole que quería verlo... pero nunca llegaba
-Mi niño, no es una buena noche para quedarse solo, andan demasiados fantasmas sueltos rondando tu cabeza y eso no es bueno, nada bueno- le dijo cariñosa Lupe tomándole tierna la mano sacándolo de su abstracción él le sonrió enternecido y le besó cariñoso la mano
 -Mi Lupita linda, que sería de mí sin vosotros y vuestro cariño- murmuró conmovido llenándosele los ojos de lágrimas; pero tomó aire profundamente no permitiendo a aquellas lágrimas salir y resuelto se puso de pie- Está bien, entonces voy a cambiarme y regreso- expuso besando cariñoso la frente de Lupe
-Te llevo- se ofreció de inmediato Jake, él le sonrió agradecido
-Os acompaño, quiero despejarme un poco y tomar algo de aire fresco que la boca aún me sabe a polvo y humo- resolvió animado Nico
-¡Volved pronto!- recomendó amena Lupe mientras salían ya de la casa.
Nico y Jake esperaban enredando revoltosos en la cocina como de niños mientras Joseph, sentado al borde de su cama, observaba fijamente la fotografía de una Helena de apenas veinte años. La había esperado tanto… Había soñado tantas veces que regresaba a su lado y ya no se volvían a separar nunca más… Pero ¿Por qué había vuelto a aparecer en su vida de aquella manera? ¿Para restregarle en las narices lo feliz que era con su esposo y las tres maravillosas hijas que tenía? ¿Para demostrarle que ella sí había rehecho su vida junto a su esposo y que realmente él nunca le había importado? Suspiró profundamente y se fue al baño tirándola a la papelera de mimbre que allí había, abrió la ducha y regresó al cuarto para desnudarse.
Pero a pesar de sus intentos, no podía dejar de pensar en Helena. La odiaba, le había hecho tanto daño que no podía perdonarla; había jugado y se había divertido a su costa sin tener ni la mínima consideración con sus sentimientos; le había mostrado lo bello que podía ser el paraíso para después dejarlo por años viviendo en los infiernos… Helena, su rostro lo tenía grabado a fuego en su mente, como sus caricias en su piel y la deliciosa ambrosía que era su boca en sus labios; solo recordarla, todo su cuerpo se estremecía de pasión… Leni, su Leni ¿a quién quería mentirle? La amaba; a pesar de todo, la seguía amando; con cada milímetro de su piel, con el cuerpo y con el alma seguía amando a aquella mujer y sabía que, a pesar de todos sus esfuerzos, nunca podría olvidarla y mucho menos dejar de amarla. Regresó al baño y recogió la fotografía descubriendo algo extraño tras la papelera que recogió también y volvió a guardar la fotografía entre las páginas del libro que había sobre la mesilla regresando abajo.
Mientras descendía por las escaleras no pudo evitar sonreír tierno escuchando a los muchachos enredar juguetones como de niños en la cocina. Pero así alcanzó el final de las escaleras, no se dirigió a la cocina, se quedó unos segundos bajo el dintel de las dobles puertas de la sala mirando fijamente las fotografías que había sobre la chimenea. Se acercó a ellas y recogió una en donde su hermana Adele le sonreía alegre a la cámara abrazando amorosa a su hija Clarise. La observó detenidamente: sus ojos, sus labios, su rostro alargado, su sonrisa... ¡¡Dios, no había lugar a dudas, Kathy se parecía de manera increíble a Adele; tanto o aún más que la pequeña Clarise!! Pero entonces... ¡¿Cuándo ocurriera?! ¡¿Y por qué rayos Helena le ocultó que estaba embarazada?! ¡¿Y por qué no le dijo en todos aquellos años que tenían una hija, maldita sea?! El sonido del teléfono lo sacó de sus cavilaciones
-¡¡Padrino, es la Lupe que ya está que se sube por las paredes ¿te falta mucho?!!- le habló Nico a voz en grito desde la cocina
-No, dile que ya vamos- respondió dejando la fotografía en su sitio y regresó con los muchachos-Jacob, creo que esto es tuyo hijo; estaba en mi baño ¿puede saberse por qué usas el mío? ¿Acaso el de invitados no tienen baño o qué?- expuso mostrando una pequeña tanga de encaje negro
 -¡¡Ey mi cuate que yo nunca usé tu casa de picadero ¿vale?!! ¡Y menos últimamente que no lo cato desde yo que sé cuánto!- respondió sincero
 -Al de invitados no le funciona bien la ducha padrino, perdona; la arreglaré mañana sin falta- musitó abochornado Nico recuperándola presuroso de la mano de Josh que abrió los ojos pasmado y aguantó como pudo la risa
 -¡¿Ves?! No, si va a ser verdad eso de toma fama y échate a dormir… ¡¡Pero no te hagas, mi cuate; enseñarme a ver que braguitas más sexys usa mi cuñadita!!- se burló malicioso Jake intentando recuperarla
-¡Estate quieto imbécil!- contestó abochornado Nico guardándosela raudo en el bolsillo de sus pantalones y ahora sí, Josh soltó tremenda carcajada seguido de Jake. Pero de pronto miró intrigado a Nico
 -¿Qué edad tiene Kathy Nico?- indagó curioso mientras observaba como Jake pícaro acercaba disimuladamente su mano al bolsillo de su hermano para robársela
-25, en Febrero hará los 26 ¿Por?- respondió tranquilo Nico sin darse cuenta de lo que su hermano se proponía
-Por nada- respondió dándole una inesperada palmada a la mano de Jake que casi había conseguido su objetivo
-¡Ey!- protestó él sobresaltado por el inesperado cachete retirando la mano sobrecogido
-¿Qué haces estúpido?- reclamó inquieto Nico comprobando que la pieza de lencería aún seguía en su bolsillo, Jake rió malicioso
-Vámonos ya o vuestra madre se inquietará aún más- resolvió animado Joseph sonriendo entretenido
Kathy conducía la ranchera muy callada y ensimismada; Ellie la observaba inquieta ante su silencio; hasta Megan la miraba desconcertada
-¿Qué tienes Kathy? ¿No te encuentras bien?- se atrevió a preguntar al fin, su hermana la miró con un brillo excitado en los ojos que la turbó
-¿Te has fijado en Joseph, Ellie?- expuso alterada
-Yo sí, desde que llegó ¡¡Es guapísimo ¿verdad?!!- resolvió decidida Megan sentada en el asiento trasero pero sus hermanas se miraban fijamente a los ojos, Ellie empezaba a inquietarse por aquella mirada
-Kathy no empieces…- indicó amedrentada temiéndose las ideas de su hermana
-No sé cómo Ellie, ni sé cuándo ocurrió pero… ¡¡él sí tiene el hoyuelo Ellie!!- aclaró conmocionada acariciándose el mentón
-Kathy, por Dios…- le reprochó abatida su hermana
-¿Qué pasa? ¿Qué hoyuelo?- indagó interesada Megan acercándose a los asientos delanteros
-Y sus ojos Ellie, son iguales, idénticos a los míos y a los de Meg ¿acaso no te fijaste o qué?- siguió exponiendo sobrecogida
-¡¡No Kathy!! ¡¡No me fijé ¿quieres dejarlo de una vez?!!- le regañó incómoda
-¡¡Sí te fijaste, te fijaste en todo porque vi cómo lo observabas tan detenidamente como yo lo hacía!! ¡¡Por Dios, no me digas que no Ellie!!- increpó fuera de sí
-¿De qué rayos habláis?- se interesó curiosa Megan
-¡¡Basta Kat!! ¡¡Ya está bien!! ¡¡No quiero seguir hablando de esto!!- gritó rotunda Ellie y clavó su mirada a través de la ventanilla evitando a su hermana
-¡Gracias ¿eh?!- protestó Megan fastidiada por la desconsideración de sus hermanas recostándose molesta en su asiento trasero; Ellie se sintió terriblemente mal por indignar a su hermana Megan pero no podía secundar las locuras de Kathy
-Kathy se casa Megan, pero no digas nada en casa hasta que el sábado Nico pida su mano- le habló tierna sin apartar la mirada de la oscura noche que se veía a través de su ventanilla
-¡¿De verdad Kat?! ¡¡Que alegría hermanita!!- se entusiasmó la muchacha abrazando el cuello de su hermana que sonrió complacida
Todos se habían acostado ya, menos Ben que se había quedado acompañado a su gran amigo preocupado por su estado. Durante la cena y el resto de la noche había estado muy callado y ensimismado, y así seguía sentado en la sala fumándose un cigarrillo tras otro, abstraído y serio.
 Josh no podía dejar de darle vueltas en su cabeza a la imagen de Kathy. No podía ser, las cuentas no daban, pero era imposible… Kathy no podía tener tanto parecido con Adele si no fuera hija suya… Tenía 25 años, en eso coincidía, pero nació en Febrero según dijera Nico y nunca olvidaría aquella calurosa tarde de Junio en la que ellos se encontraran por casualidad, eso solo hacían ocho meses; entonces, Leni ya estaba embarazada de Kathy cuando empezaron a verse… ¡Pero no podía ser! ¡Esa chiquilla era el vivo retrato de su hermana Adele!
-¿No piensas dormir hoy hermano?- le interrumpió sus cábalas Ben, lo miró descolocado- ¿Qué tanto piensas Josh? Déjalo estar compadre, con darle vueltas a la cabeza no solucionarás nada; las cosas suceden por algo y ya se sabrá por qué Dios o el mismo demonio la ha vuelto a poner en tu camino- le habló amistoso
-No pensaba en eso- expuso serenamente encendiéndose otro cigarrillo, soltó una bocanada de humo sin apartar su mirada perdida en el frente- ¿Te has fijado en Kathy Ben?
-Ah ya- musitó asintiendo con la cabeza- a mí también me impresionó su parecido con Adele cuando la conocí hermano; pero, aunque sea increíble, no es posible- aclaró resuelto, Josh lo miró de soslayo sin atreverse a mirarlo fijamente a los ojos y a Ben no le hizo falta más- ¡¿No me jodas que tú y Leni…?!- exclamó abriendo pasmado sus ojos
-Sí- musitó apagadamente
-¿Cuándo? ¿Cómo?... ¡¿Cuándo?!- exclamó incrédulo mirándolo anonadado
-Hace 25 años Leni y yo nos encontramos de casualidad y… estuvimos viéndonos durante unos meses
-¡¡Ay la hostia!!- exclamó atónito dejandose caer de espaldas contra el respaldo del sofá aunque de inmediato volvió a enderezarse acercándose de nuevo a él- entonces… ¿Kathy es hija tuya compadre?- interrogó mirándolo interesado en su respuesta
-Puede… Aunque según las cuentas creo que no… Pero observando el parecido casi podría asegurar que sí… ¡¡Oh Dios!! ¡¡No lo sé Ben!! Realmente no lo sé- exclamó confundido frotándose inquieto la frente- la época coincide, el año coincide pero… las cuentas no me dan hermano- explicó aturdido y ambos se miraron confusos- nos encontramos en Junio, nunca lo olvidaría pero además lo sé bien porque fue justo la tarde que regresamos de aquel primer embarco que realicé tras mi llegada del Vietnam y que casualmente coincidimos los dos después de años ¿te acuerdas?- Ben asintió con la cabeza- pero Kathy nació según Nico en Febrero ¡¡falta un mes Ben!! ¡¡Eso solo son ocho meses!!- aclaró desconcertado
-Entonces, ya estaba embarazada de su esposo cuando estuvisteis juntos- resolvió su buen amigo
-Eso pienso yo también; además Megan también tiene los ojos grises, puede que los hereden de su padre ¿no?- comentó abatido pero lo miró sobrecogido- Pero no tiene lógica, a pesar de eso ¿Cómo se explica entonces que Kathy sea un cuadro de Adele, Ben?- ambos se quedaron callados mirándose completamente enredados
-Pues solo le encuentro una explicación compadre…- habló muy pausadamente Ben y Josh lo miró interesado- todos sabemos que un embarazo por muy bien que parezca ir, es muy delicado, le pueden afectar muchísimas cosas… y ese desgraciado le hacía la vida imposible…
-¡Eso es una asquerosa mentira!- escupió furioso mirando dolido a su amigo que lo observó desconcertado- eso cuenta ella, pero no es cierto Ben; tuvo oportunidad de abandonarlo, yo la esperaba con mis brazos abiertos y todo el amor del mundo pero prefirió despreciarme y quedarse a su lado… ¡¡Tan mal no debía tratarla ¿no?!!- exclamó sarcástico mirando a su amigo con gran dolor en su mirada
-¿Me quieres decir entonces que las muchachas también mienten hermano? Porque yo a ella no la vi, pero el dolor y la angustia con la que las muchachas nos contaron las tremendas palizas que ese capullo le infringía a Leni conmovía ¿quieres decirme que también mentían compadre?- Josh lo miraba incrédulo, no podía creerlo- aquel dolor y aquellas lágrimas no eran simuladas hermano, esas muchachas sufrieron lo que no está escrito viendo sufrir a su madre… quien dice que a lo mejor vivir en esa angustia, la tensión de una pelea o vete tú a saber si no fue una paliza, no anticipó el parto hermano; puede que sea prematura
-Prematura- repitió quedándose ensimismado nuevamente, de pronto miró con los ojos inundados de lágrimas a su gran amigo- ¿Y si tan mal lo estaba pasando por qué me despreció de nuevo dejándome a un lado? ¿Por qué no vino conmigo cuando yo llamé con toda la intención de ir a buscarla cuando regresé de aquel maldito viaje al Mar del Norte, Ben? ¿Por qué no me buscó si sabía que la esperaba, que la amaba con locura y que acudiría de inmediato a su lado?! ¡¿Qué iría a por ella hasta el fin del mundo si fuese preciso?! ¡¿Por qué Ben?! ¡¿Por qué?!- clamó afligido y las lágrimas corrían imparables por sus mejillas; Ben, conmovido y abatido por el dolor de su hermano, solo pudo mover incomprensible los hombros- ¡¿Y por qué me ocultó que teníamos una hija, Ben?! ¿Acaso para hacerme aún más daño? ¿No fue suficiente todo el que me hizo con sus rechazos que también tuvo que callar esto? Sabía que era lo que yo más deseaba en este mundo, Ben: tener un hijo, una familia... ¿por qué negarme eso también Ben?- sollozó hundiendo abatido sus hombros y, bajando la cabeza, lloró desconsolado durante largo tiempo ante la mirada angustiada de Ben que no sabía qué hacer para consolar aquella enorme amargura de su hermano del alma.